Ministro de Salud de Rusia: "Esperamos tener varias vacunas contra el covid-19 en el mercado"

El ministro de Salud de Rusia, Mijaíl Murashko, ha declarado este viernes en una entrevista con el canal Rossiya 24 que en el país pueden aparecer a la vez varias vacunas contra el nuevo coronavirus. "Voy a subrayar que una vacuna es un medicamento. Por eso, obviamente, esperamos que en el mercado aparezcan varios medicamentos", señaló.

"Vemos que, en general, en el mundo ya se han formado los grupos, los prototipos que siguen aproximadamente direcciones parecidas, y que apuestan por distintos tipos de vacunas, eso está muy bien", recalcó el ministro.

Arrancan los ensayos clínicos de las vacunas contra el coronavirus en Rusia

Murashko agregó que cada eventual vacuna tendrá su propio plazo de protección del organismo contra el covid-19 y, de momento, no se sabe cuánto tiempo durará su eficacia. "Aún queda por ver por cuánto tiempo se preservará la inmunidad específica después de la vacunación. Todo eso se sabrá durante la observación", dijo.

En la entrevista, el ministro también refutó las extendidas suposiciones erróneas de que el coronavirus deja de ser tan peligroso cuando llega el calor. "Sabemos que ciertas temperaturas favorecen la transmisión de la infección causada por coronavirus, pero digamos que hay período estival. Estamos en contacto con nuestros colegas, y con aquellos que son de países donde la temperatura se mantiene alta desde hace mucho, y dicen que la actividad de la infección por coronavirus no disminuye", afirmó.  

• A diferencia de los fármacos, cuya eficacia se estima por sus efectos en las personas que ya tienen cierta enfermedad, las vacunas experimentales se administran a personas sanas que luego se ven expuestas al microorganismo nocivo. Después de meses o años de observación, los científicos pueden considerar su invento como exitoso si aquellas personas no se contagiaron tras la inyección.
• Por regla general, las vacunas experimentales son probadas en miles de personas que residen en zonas de contagio, aunque también es común que estos estudios involucren a unas decenas de voluntarios que son vigilados por los médicos por si presentan síntomas de la enfermedad tras ser infectados.

• De esta forma, los investigadores pueden decidir si merece la pena seguir adelante con el desarrollo de la vacuna probada o si es mejor buscar otro remedio.