López Obrador revela que Alberto Fernández le pidió ayuda para renegociar la deuda argentina que está en moratoria
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reveló este viernes que su colega argentino Alberto Fernández le pidió ayuda en medio de la renegociación de la deuda que lleva a cabo, y que mantiene en una moratoria al país sudamericano.
En su tradicional conferencia mañanera, López Obrador destacó la relación que tiene con varios empresarios y, sin que nadie lo cuestionara al respecto, contó que hace poco sostuvo una llamada telefónica con Larry Fink, presidente del fondo de inversiones BlackRock.
"Ayudé en buscar una salida en el manejo de la deuda de Argentina", aseguró de manera sorpresiva, ya que hasta ahora se desconocían pormenores de esta gestión.
El presidente @lopezobrador_ informó que ayudó a buscar una salida para la renegociación de la deuda de Argentina con algunos fondos de inversión.La intervención fue un pedido de su homólogo, el presidente @alferdez“Es mejor el arreglo para todos”, afirmó esta mañana. pic.twitter.com/YX2hQ2xohi
— Gobierno de México (@GobiernoMX) June 12, 2020
Al entrar en detalles, López Obrador explicó que Fernández lo buscó porque sabía de su buena relación con Fink, y le dijo que Argentina estaba buscando una negociación de su deuda y que ya tenían un dictamen de cuánto sería el monto que podían reconocer.
De acuerdo con su versión, Fernández le dijo que quería cumplir, pero sin firmar acuerdos que el país sudamericano no pudiera sostener. Por eso, el mandatario argentino le pidió a López Obrador que le explicara a Fink que la propuesta de Buenos Aires era pagar el 41 % de la deuda, es decir, que los acreedores aceptaran una quita del 59 % para poder llegar a un entendimiento.
"Él es una buena persona, el presidente de Argentina es excepcional. Entonces le expliqué a Larry Fink si estaba enterado completamente del asunto y ellos empezaron haciendo una propuesta, como es en las negociaciones", señaló.
"Nuestro mayor esfuerzo pasa por que la deuda pueda ser sostenible. Que cuando yo no esté en el Gobierno, quien se haga cargo de la Argentina pueda pagarla. Con nuestra oferta los acreedores no pierden, solo ganan menos". @alferdez en #MinutoUno por @C5N. #AlbertoenM1pic.twitter.com/ds3VLOtZFr
— Alberto Fernández Prensa (@alferdezprensa) May 12, 2020
El empresario estadounidense le advirtió que la respuesta no dependía solo de su firma, sino del resto de los fondos de inversión que también son acreedores de Argentina.
"El caso es que iba a proponer a su consejo que se aceptara, por parte de Argentina, una quita del 50 al 55 % de la deuda total", dijo López Obrador, quien después le transmitió esta posición a Fernández.
"Ya le dije al presidente: así está. Las recomendaciones siempre en el sentido de que es mejor el arreglo para todos porque, aunque parece que es un asunto que sucede en otro país. Si, a veces estas cosas afectan la estabilidad económica, financiera del mundo, de otros países", explicó.
Argentina entró en 'default' o cesación de pagos el pasado 22 de mayo, cuando venció el último plazo para que cubriera vencimientos por 503 millones de dólares correspondientes a su deuda externa.
Carmen Reinhart, nueva economista jefe del Banco Mundial, es una de las autoras de esta carta abogando por la reestructuración de la deuda privada Argentina. Entre los firmantes están economistas como Joseph Stiglitz y Thomas Piketty.https://t.co/A93UdGYZWn
— Andrés Jácome (@andresfjacome) May 21, 2020
Sin embargo, el gobierno de Fernández continúa una dura renegociación con sus acreedores para acordar nuevos montos y plazos de pago de tres bonos específicos de la deuda externa, que en total suman 66.238 millones de dólares.
La propuesta era comenzar a pagar la deuda en 2023 con una quita del 62 % de intereses, lo que representaría un alivio de 37.900 millones de dólares para el país sudamericano. La quita de capital, en tanto, sería de un nivel mínimo del 5,4 %.
Dicho plan no ha sido aceptado por los acreedores, quienes no descartan por completo aceptar una quita, pero quieren cobrar entre el 50 % y 60 % del valor original de sus bonos, mientras que el gobierno argentino ofrece pagarles el 40 %.