Corea del Sur promete "responder fuertemente a cualquier posible provocación militar de Corea del Norte"

El Ministerio de Defensa surcoreano ha prometido este 16 de junio "responder fuertemente a cualquier posible provocación militar de Corea del Norte", informa Yonhap.

Esta declaración se produce varias horas después de que Pionyang destruyera la oficina de enlace intercoreana, ubicada en la región industrial norcoreana de Kaesong, a 10 kilómetros al norte de la zona desmilitarizada entre ambas Coreas.

Desde el Ministerio han asegurado que el Ejército surcoreano "ha estado monitoreando de cerca los movimientos de los militares de Corea del Norte durante todo el día y haciendo todo lo posible para manejar la situación, evitando que la situación se convierta en una crisis militar".

Al mismo tiempo, han manifestado que "si Corea del Norte lleva a cabo acciones militares provocativas, nuestro Ejército responderá fuertemente a ellas".

Por su parte, la Presidencia surcoreana ha lamentado la destrucción de la oficina de enlace, que fue "un símbolo de reconciliación" entre las dos Coreas, y ha declarado que este paso de Pionyang "rompió las expectativas de todas las personas que esperan el desarrollo de las relaciones intercoreanas y una paz duradera en la península".

"Estamos dejando en claro que el Norte es completamente responsable de todas las consecuencias que esto pueda causar", ha advertido en rueda de prensa el asesor adjunto de Seguridad Nacional surcoreano, Kim You-geun.

"Amenazas casi diarias"

Pionyang destruyó la oficina de enlace intercoreana "luego de amenazas casi diarias" de Corea del Norte "de castigar a Seúl por folletos de propaganda anti-Pionyang", indicó Yonhap.

Así, la noche del sábado pasado la hermana del líder norcoreano Kim Jong-un, advirtiera que "en poco tiempo, se vería una escena trágica de la inútil oficina conjunta de enlace Norte-Sur".

La hermana de Kim Jong-un amenaza a Corea del Sur con pasar a las acciones militares

Además, este martes antes de la explosión el Estado Mayor General del Ejército Popular de Corea del Norte advirtió de que está estudiando mover las tropas hacia "las zonas que habían sido desmilitarizadas bajo el acuerdo Norte-Sur, convertir la línea del frente en una fortaleza y aumentar más la vigilancia".

Después de la explosión, el Ejército de Corea del Sur ha endurecido la vigilancia y el estado de preparación ante posibles enfrentamientos accidentales cerca de las zonas fronterizas, cita la agencia a las autoridades surcoreanas.

De momento, según un oficial del Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur, "no se han detectado movimientos militares inusuales y específicos por parte del Ejército de Corea del Norte".