Ante el rebrote del coronavirus, Pekín vuelve a imponer la cuarentena: a los residentes de 28 barrios de la capital se les ha prohibido abandonar la ciudad, mientras que los demás lo podrán hacer solo tras dar negativo en los test.
Este martes, la capital registró 31 nuevos casos de coronavirus. Las autoridades han otorgado el nivel medio de riesgo a 27 barrios y de alto a un barrio cercano al mercado de Xinfadi, epicentro del rebrote y causa de 137 infecciones en una semana.
Los habitantes de este último barrio no pueden abandonar sus calles y serán sometidos a pruebas. En total, se tomarán muestras a 200.000 personas que han visitado el mercado en las últimas dos semanas.
El regulador capitalino de mercados ha enviado a 20.000 funcionarios para controlar la desinfección de mercados, restaurantes y tiendas de comestibles a lo largo de la ciudad.
Antes de esta segunda ola, la urbe, que cuenta con 21 millones de habitantes, vivió 57 días sin ver ni un solo caso de contagio local.
Según Global Times, 1.255 vuelos, de ellos 615 salidas y 640 llegadas, han sido cancelados en la capital china a las 9:10 (hora local) de este miércoles, después de que se adoptara en la ciudad el segundo nivel de emergencia.