Un perturbador video viral, que muestra a una mujer negra embarazada siendo tirada al suelo por guardias ferroviarios en las afueras de París, ha causado una ola de indignación en Francia.
El clip, que acumula más de un millón de vistas, comienza con un agente de la SNCF (compañía nacional de ferrocarriles de Francia) que empuja a la mujer embarazada de siete meses hacia atrás en la estación de tren en Aulnay-sous-Bois.
Luego la jalan y la tiran al suelo mientras la mujer grita: "No me empujes". Después de que dos agentes la inmovilizan presionando en el estómago, la mujer empieza a gritar de dolor.
Mientras la derriban, se puede escuchar a un hombre negro, su compañero, tratando de ayudarla y suplicando a los agentes: "Déjenla en paz. Ella está embarazada". Intenta intervenir, pero otros dos agentes de seguridad ferroviaria de SNCF le impiden hacerlo.
Se puede escuchar a la mujer gritar mientras su compañero intenta intervenir nuevamente, intentando dar una patada al agente de seguridad que empujó a su compañera y que en ese momento la está esposando.
"¡Está embarazada!", se puede escuchar una voz masculina, aparentamente la de la persona que grabó el video: "¡Está embarazada! ¡Ella está embarazada! ¡Lo juro por Dios, te estás equivocando! ¡Ella está embarazada!"
Sin embargo, los agentes lo ignoran y les dicen a las personas que intentan intervenir que salgan de la estación. Luego uno de ellos golpea a la mujer en la cabeza, haciendo que se caiga su peluca. La grabación termina con otros dos agentes tratando de inmovilizar a la pareja de la mujer.
Empresa ferroviaria responde
La SNCF ha defendido a sus empleados, alegando que el video no muestra el altercado completo y que la mujer embarazada se negó a usar una mascarilla, escupió y mordió a los agentes, y que solo actuaron de tal manera después de decirle tres veces que tenía que abandonar la estación, informan medios locales. Tres agentes de SNCF han presentado una queja tras lo ocurrido.
La mujer, identificada como Diatou, de 23 años, fue llevada al hospital donde se confirmó que estaba embarazada de siete meses. Luego pasó siete horas detenida antes de ser puesta en libertad bajo fianza y bajo supervisión judicial. El estado de salud del feto no está claro.
Según los informes, su compañero fue puesto bajo custodia policial por "desprecio y violencia". Diatou, por su parte, también presentó una denuncia ante las autoridades. Hablando después del incidente, que tuvo lugar la semana pasada, dijo a los medios locales que no hizo nada para provocar tal comportamiento de los agentes.