China ha afirmado este viernes que impondrá "medidas recíprocas" a EE.UU. en respuesta a las sanciones impuestas contra cuatro políticos chinos y una entidad gubernamental, argumentando "graves abusos de derechos" de la etnia uigur en la región de Xinjiang, al noroeste del país asiático.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Zhao Lijian, mencionó que la acción de Washington marcó una grave interferencia en los asuntos nacionales y fue profundamente perjudicial para las relaciones bilaterales, informa Reuters.
Las medidas punitivas afectan al secretario regional del Partido Comunista, Chen Quangu; a Zhu Hailun, exsubsecretario regional del partido; a Wang Mingshan, director y secretario del Partido Comunista de la Oficina de Seguridad Pública de Xinjiang y a Huo Liujun, exsecretario de la Oficina, así como a la propia Oficina de Seguridad Pública de Xinjiang.
Según el Departamento del Tesoro de EE.UU., la entidad y los funcionarios estarían relacionados con un caso, que, supuestamente, incluiría "la detención arbitraria masiva y el abuso físico severo" de una minoría étnica.
Las sanciones se impusieron en virtud de la Ley Global Magnitsky, que permite al Gobierno estadounidense sancionar a quienes cometan violaciones de derechos humanos en todo el mundo mediante la congelación de cualquier activo en EE.UU., restricciones de viajes y prohibiciones a los estadounidenses a hacer negocios con ellos.