La Amazonía brasileña bate un nuevo récord de alertas de deforestación en junio
La Amazonía registró este mes de junio alertas de deforestación en 1.034 kilómetros cuadrados, un récord para este mes desde 2015. Estos datos son un 10,6 % mayores que los registrados en el mismo mes del año anterior.
Esta información es proporcionada por el sistema de Detección de Deforestación en Tiempo Real (Deter) del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (Inpe). El sistema sirve para que los equipos de inspección sepan el lugar en el que ocurren los delitos ambientales.
Además, entre el 1 de enero y el 30 de junio, la deforestación también alcanzó un récord de 3.070 kilómetros cuadrados, un 25 % que el mismo periodo de 2019. Por otro lado, en los últimos 11 meses, las alertas de deforestación han aumentado un 64 % frente al mismo período anterior.
Este ritmo de deforestación se produce incluso después de que en mayo presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, autorizase el despliegue del Ejército en la Amazonía para combatir la deforestación y los incendios, y a pesar de la presión de los inversores brasileños y extranjeros al Ejecutivo para que controle el problema.
Reunión con inversores
Precisamente el jueves, el vicepresidente Hamilton Mourao, que coordina el Consejo de la Amazonía, mantuvo una reunión con los inversores en la que intentó quitar responsabilidades al Gobierno por el aumento de la deforestación.
"No es cierto que estemos destruyendo la selva para producir alimentos", aseguró Mourao, quien no explicó el motivo por el que la deforestación sigue creciendo, a pesar de tener desplegado al Ejército en el terreno.
Los focos de incendios en la Amazonía también aumentan y en junio se registraron 2.248 focos, un aumento del 19,5% frente al año anterior, y que suponen los peores datos registrados en este mes desde 2007, cuando hubo 3.519.
"Incluso si no se quema ningún metro cuadrado en la actual temporada de incendios, que se extiende hasta septiembre –como espera el vicepresidente de la República, Hamilton Mourao al proponer este año otra vez una moratoria de incendios en la Amazonía– el mayor daño ya está hecho", aseguró Edgar Rosa, director de Conservación y Restauración del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) en Brasil.
Está previsto que la semana que viene Bolsonaro –que impulsa proyectos agropecuarios y mineros en zonas protegidas– decrete una moratoria de incendios en la que se prohibirán durante 120 días los fuegos en la Amazonía y el Pantanal.
WWF recordó que se trata del segundo año consecutivo en el que aumenta la desforestación en la Amazonía desde la llegada al poder de Bolsonaro, con una política que alienta a los madereros y mineros ilegales y a los invasores de tierras principales causantes de esta devastación.
El año pasado se registraron en la Amazonía unos violentos incendios que provocaron una enorme conmoción internacional y por los que Bolsonaro fue muy criticado.