En Indonesia, un hombre declarado culpable de abusar sexualmente de dos niños, fue castigado públicamente bajo la ley musulmana de la Sharía con 74 latigazos. Lo curioso del castigo fue que el condenado llevaba un protector facial, aparentemente, patrocinado por una empresa local de turismo, aunque se desconoce si buscaba hacer publicidad o se trató de una simple coincidencia.
El castigo se llevó a cabo este miércoles en la provincia de Aceh, de mayoría musulmana. Inicialmente, el procesado fue condenado a 80 azotes por los crímenes cometidos en enero del 2019, pero después de pasar medio año en prisión se le redujo la pena a 74 latigazos, informa la prensa local.
Tras recibir aproximadamente la mitad de los golpes, el sentenciado pidió hacer una pausa para hidratarse. La ejecución se llevó acorde con los protocolos sanitarios establecidos por la pandemia de coronavirus.