Enfrentamientos entre la Policía israelí y manifestantes tuvieron lugar este sábado en Jerusalén y Tel Aviv durante las protestas contra el primer ministro Benjamín Netanyahu.
Los Policía utilizó cañones de agua y unidades montadas para dispersar a los miles de manifestantes congregados, que exigían la renuncia de Netanyahu y se manifestaron contra la respuesta del Gobierno a la pandemia de coronavirus.
Los manifestantes argumentaron que, en lugar de tomar medidas para evitar la segunda ola de la enfermedad, el primer ministro estaba más preocupado por sus propios problemas legales.
"Señor primer ministro, la segunda ola del coronavirus no sorprendió a nadie. Sabía que se acercaba. Pero desperdició su tiempo en tonterías. (...) En lugar de planear una lucha contra el sistema judicial, debería haber planeado luchar contra el desempleo", dijo un manifestante en Tel Aviv, citado por Times of Israel.
Netanyahu enfrenta cargos de fraude, sobornos y abuso de confianza en tres casos separados. El político niega todas las acusaciones y afirma que los cargos son parte de un esfuerzo de sus opositores para destituirlo de su cargo.
Este domingo se celebrará en el Tribunal de Distrito de Jerusalén la segunda audiencia en el juicio por corrupción de Netanyahu. Según Haaretz, se centrará en el tiempo adicional que se dará a los abogados del político para estudiar el material de investigación.
El 5 de julio, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, advirtió que el país vive una situación de emergencia por un rebrote del covid-19. El Gobierno de Israel ordenó el cierre de bares, clubes nocturnos, salas de eventos y gimnasios ante la situación. Las restricciones han tenido un alto costo económico para el país.
Según los datos de la Universidad Johns Hopkins, en Israel se han detectado desde el inicio del brote más de 49.000 casos del covid-19. De ellos, 401 resultaron fatales.