Defensoría del Pueblo de Colombia confirma la masacre de ocho campesinos en el noreste del país
La Defensoría del Pueblo de Colombia confirmó este domingo que ocho personas, entre ellas varios dirigentes campesinos, fueron masacradas en una zona rural entre la ciudad de Cúcuta y el municipio de Tibú, Norte de Santander, al noreste del país suramericano.
"Requerimos atención urgente de los entes de investigación, así como atención inmediata para las víctimas y las numerosas familias que se han desplazado en la zona", señaló la Defensoría del Pueblo en twitter, tras llegar al lugar y verificar el "aterrador hecho".
ADVERTENCIA: Las siguientes imágenes pueden herir su sensibilidad
1. Tras denuncias de una masacre perpetrada el día de ayer en zona rural de Cúcuta, Norte de Santander, @DefensoriaCol verifica #AEstaHora este aterrador hecho. #BastaYa#QueCeseLaViolenciaYapic.twitter.com/CSH2bZhi4s
— Defensoría delPueblo (@DefensoriaCol) July 19, 2020
A su vez, la Asociación Campesina de Catatumbo (Ascamcat) denunció que tras la masacre se ha intensificado el desplazamiento forzado, "en medio de la ausencia de las autoridades competentes, que brinden las garantías de seguridad" necesarias.
"Los pobladores denunciaron el temor a que los armados regresen y puedan generar más hechos lamentables", manifestó Ascamcat, que calcula que alrededor de 400 personas están abandonando la zona.
La imagen del #DesplazamientoForzado de las comunidades por #Masacres se repite una vez más.Hoy alrededor de 400 personas, se desplazan pertenecientes a las comunidades de las veredas Totumito y Vigilancia de la zona rural de #Cúcuta hacía el corregimiento Banco Arena pic.twitter.com/TIGJUy2PgW
— AscamcatOficial (@AscamcatOficia) July 19, 2020
Al respecto, la Gobernación del Norte de Santander hizo "un llamado a los grupos violentos para que excluyan del conflicto a la población civil" y pidió "a las autoridades competentes esclarecer los móviles y hechos" que dieron lugar a esta masacre.
La Gobernación de Norte de Santander, rechaza los actos violentos registrados entre la zona rural de Cúcuta y Tibú el día anterior. Hacemos un llamado a los grupos violentos para que excluyan del conflicto a la población civil. Una vez confirmados los hechos por parte de la..👇👇
— Gobernación de Norte de Santander (@GoberNorte) July 19, 2020
En la zona hacen presencia el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el Ejército Popular de Liberación (EPL), disidentes de las disueltas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y bandas delictivas que se enfrentan por corredores para el narcotráfico.
Por su parte, Wilfredo Cañizares, defensor de los derechos humanos e integrante de la Fundación Progresar, denunció que "los paramilitares de Los Rastrojos tienen 8 años delinquiendo en la zona", pero la Policía regional todavía "no se ha enterado".
El comandante de la Policía en Norte de Sder, dice desconocer los autores de la masacre de 7 campesinos en Totumito. Tiene razón, los paramilitares de los Rastrojos tienen 8 años de estar en delinquiendo en la zona y ellos no se han enterado. pic.twitter.com/VlwN92DkGI
— WILFREDO CAÑIZARES (@wilcan91) July 20, 2020
Los hechos fueron condenados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que observa "con alarma" la violencia "sostenida" en diversos territorios de Colombia.
En ese sentido, insta al Estado a "investigar de oficio los hechos" y a "disponer las medidas de seguridad" necesarias para estas comunidades y sus lideres sociales.
#Colombia🇨🇴 La @CIDH condena asesinato de ocho campesinos del municipio de Tibú, a manos de grupos al margen de la ley. [1]
— CIDH - IACHR (@CIDH) July 19, 2020
A esta condena se sumaron la ONG Human Rights Watch y la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia de la Organización de Estados Americanos (MAPP/OEA).
Hasta el pasado mes de junio, el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) había registrado el asesinato de 138 líderes y defensores de los derechos humanos, al igual que el de 35 exguerrilleros firmantes del Acuerdo de Paz entre el Estado y las extintas FARC.