El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, vetó este martes una ley que ordenaba otorgar una compensación económica a los trabajadores de la salud que se hubieran visto 'permanentemente incapacitados' por consecuencias del coronavirus durante la atención médica a pacientes.
El Poder Ejecutivo anuló así los alcances de la ley 1.826, que había sido aprobada por ambas cámaras del Congreso, bajo el argumento de que el pago de esa bonificación impactaría negativamente en el presupuesto del Estado nacional, por lo que resulta "contraria al interés público" e "inconstitucional", señala el texto publicado en el Diario Oficial.
La Presidencia consideró "el mérito de la propuesta y la buena intención del legislador", pero remarcó que la iniciativa contiene "obstáculos legales" que impedirían su aplicación en el contexto de calamidad pública que atraviesa el país por la pandemia.
En la misma jornada, la diputada Fernanda Melchionna, autora del proyecto, cuestionó la decisión y acusó duramente al mandatario como responsable de la grave situación sanitaria: "Un genocida que aún se lava las manos por aquel que da su vida para protegernos. ¡Lucharemos para derribar esta crueldad!", escribió la legisladora en su cuenta de Twitter.
La ley establecía el pago de 50.000 reales (unos 9.430 dólares) a los trabajadores afectados o, en su defecto, a sus cónyuges, personas a cargo o herederos.
Brasil sigue siendo el segundo país más afectado por la pandemia en el mundo, solo detrás de EE.UU. La nación suramericana ha registrado hasta este lunes un total de 2.750.153 contagios de covid-19, mientras que los fallecidos suman 94.660,según el balance de las autoridades sanitarias.
El propio Bolsonaro, quien ha minimizado el impacto de la crisis sanitaria mundial y puesto el foco en el cuidado del empleo y la economía, dio positivo al coronavirus y tuvo que mantenerse aislado durante dos semanas, hasta que se recuperó.