El Supremo Tribunal Federal de Brasil (STF) decidió por unanimidad mantener una medida cautelar que obliga al Ejecutivo a proteger a los indígenas de la pandemia del coronavirus.
A principios de julio, el juez Luís Roberto Barroso concedió la medida cautelar tras una petición de varios partidos de la oposición y de la Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (Apib). El mismo día en el que el magistrado tomó esta decisión, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, sancionó con vetos la ley que protege a los pueblos indígenas del virus.
La medida obliga a crear una "sala de situación" para gestionar el combate de la pandemia con la participación de los indígenas, así como cordones sanitarios. Además, el Gobierno deberá elaborar un plan para retirar a los invasores ilegales y garantizar a la comunidades el acceso a la salud.
"Inacción inaceptable"
"La inacción del Gobierno federal en relación con las invasiones en tierras indígenas es inaceptable", declaró el juez Barroso durante la votación.
A pesar de que Barroso considera "imperativa" la salida de los invasores, el magistrado explicó que una retirada inmediata no sería adecuada debido al conflicto que podría originarse y que pondría en riesgo "la vida, la salud y la seguridad de las comunidades". Sin embargo, destacó la necesidad urgente de que el Ejecutivo aborde el problema y desarrolle el plan de expulsión. "De no hacerlo, volveré al tema", afirmó.
Por su parte, el juez Alexandre de Moraes calificó de "problema muy grave" las invasiones ilegales en tierras indígenas, pero también comentó que las operaciones para sacarlos "no son simples", porque en muchos casos están ya establecidos en esas regiones con sus familias. En su opinión, se necesitarán a miles de profesionales –asistentes sociales, psicólogos, médicos, entre otros– para ir orientando a esas personas.
Asimismo, Moraes recordó que los indígenas son más vulnerables al coronavirus y que el virus puede causar daños incalculables.
Esta semana, el famoso fotógrafo brasileño Sebastiao Salgado pidió al STF que obligase al Gobierno a expulsar a los invasores ilegales de las tierras indígenas. "Realmente la esperanza está en manos de la Corte", enfatizó.
Según la Secretaria Especial de Salud Indígena (Sesai), desde que comenzó la pandemia se han registrado 16.840 casos de contagio entre los indígenas y 300 fallecidos. Por su parte, Apib contabiliza 21.646 infectados y 623 decesos.
Con 2.859.073 de personas contagiadas y 97.256 fallecidas, Brasil es el segundo país más afectado por la pandemia en el mundo, solo detrás de EE.UU.