El juez Felix Fischer del Supremo Tribunal Federal (STF) revocó la prisión domiciliar a Fabricio Queiroz, exasesor del senador Flávio Bolsonaro, hijo del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro.
Queiroz, detenido en junio por supuesta corrupción, se encontraba en prisión domiciliar desde el 9 de julio, después de que un juez considerase que pertenecía al grupo de riesgo por un cáncer de colon que padece. Su mujer, Marcia Aguiar, también en arresto domiciliario tras haber estado prófuga de la Justicia, deberá ingresar en prisión.
En diciembre del año pasado, el Consejo de Control de Actividades Fiscales de Brasil (COAF) detectó "transacciones atípicas" en las cuentas del exasesor de Flávio, por un valor de 1,2 millones de reales (unos 307.000 dólares), cuando este era diputado en la Asamblea Regional de Río de Janeiro, entre 2012 y 2016.
"Un año desaparecido"
Tras permanecer más de un año en paradero desconocido, Queiroz fue detenido en junio en el interior del estado de Sao Paulo, en una casa que pertenece al abogado Frederick Wassef, defensor de la familia Bolsonaro en diversos procesos.
Además, el senador Flávio también está siendo investigado por la Fiscalía por una posible red de sobornos. A principios de agosto, en una entrevista con O Globo, Flávio admitió que Queiroz le pagaba sus facturas personales, pero negó el uso de dinero ilícito.
"Puede ser que enviase a Queiroz a pagar alguna cuenta. Tomo mi dinero, se lo doy y él va al banco y paga por mí. Querer vincular eso a algún tipo de esquema que yo tenga con Queiroz es como criminalizar a cualquier secretaria que vaya a pagar la cuenta bancaria de un jefe", justificó.