El periodista indígena Abelardo Liz fue asesinado tras recibir impactos de bala en el abdomen y el pecho mientras cubría las acciones de los cuerpos de seguridad en una comunidad indígena en una zona rural de Corintio, en el norte del Cauca.
En los hechos de violencia ocurridos en el resguardo Páez de Corinto también resultó muerto Johan Rivera, con impacto de bala en el hombro, la espalda y la cabeza. Dos personas más fueron heridas.
Según un comunicado de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), el pasado jueves el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD), la Policía Nacional y la Fuerza Pública de Colombia realizaron un desalojo forzado en siete fincas de miembros de la comunidad indígena nasa que reclaman el territorio como suyo.
¿Qué ocurrió?
La Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca ha publicado en su página web que "el Ejército disparó ráfagas de fusil" contra los indígenas que se encontraban en los terrenos pretendidos.
La víspera, según la asociación, hubo una "agresión coordinada" entre los cuerpos de seguridad que presuntamente destruyeron "el punto de control territorial para la prevención de la peste, cambuches (viviendas improvisadas) y cultivos".
En esta denuncia se agrega que "la fuerza pública impidió el ingreso oportuno de vehículos y personal de salud a recoger los heridos para trasladarlos a centros asistenciales" y que las unidades de rescate habrían sido atacadas con gases.
Por su parte, la Misión de la Organización de Naciones Unidas en Colombia ha condenado la muerte de los dos indígenas y ha pedido que "los crímenes sean investigados y los responsables sancionados".