Imágenes claras de las estrellas en el cielo nocturno "ya no serán la norma" debido al aumento de las constelaciones de satélites ubicados en la órbita terrestre baja (LEOsats), advirtió un grupo de más de 250 científicos, ingenieros, operadores y otros expertos en un informe, publicado este martes.
Además, los investigadores anotaron que los satélites cambiarán fundamentalmente la astronomía óptica e infrarroja basada en la Tierra. "Los recientes desarrollos tecnológicos para la investigación astronómica –especialmente las cámaras con amplios campos de visión en grandes telescopios ópticos infrarrojos– tienen lugar al mismo tiempo que el rápido despliegue de muchos miles de LEOsats por parte de compañías que están implementando nuevas tecnologías de comunicación desde el espacio", explicó Connie Walker, de la Fundación Nacional para la Ciencia de EE.UU.
Las constelaciones de LEOsats, entre ellas Starlink, de la compañía SpaceX de Elon Musk, se usan para proveer servicios de comunicaciones en áreas remotas, sin embargo, afectan a las investigaciones científicas, como la búsqueda de asteroides y cometas, que podrían amenazar a nuestro planeta, u objetos del sistema solar exterior, entre otros.
Según los expertos, la única forma de salvar completamente el cielo nocturno es "lanzar menos o ningún LEOsats", lo que es "poco práctico". Por eso, los especialistas ofrecieron una serie de alternativas para reducir los perjuicios a la astronomía:
- Desplegar los satélites a altitudes orbitales no superiores a los 600 kilómetros
- Oscurecerlos o usar parasoles para sombrear sus superficies reflectantes
- Controlar la orientación de cada satélite en el espacio para reflejar menos luz solar a la Tierra
- Minimizar o eventualmente poder eliminar el efecto de los rastros de los satélites durante el procesamiento de las imágenes astronómicas
- Poner a disposición de los satélites información orbital más precisa para que los observadores puedan evitarlos con telescopios
"Si se lanzan 100.000 o más LEOsats de muchas empresas y muchos gobiernos, ninguna fórmula de mitigación puede evitar completamente los impactos" en la astronomía, concluyó el informe.