Un residente de la aldea de Urkaraj, en la república rusa de Daguestán, al norte del Cáucaso, encontró durante unos trabajos de renovación de su casa dos antiguas catacumbas con restos humanos en su jardín, informaron las autoridades locales este domingo.
Las cámaras subterráneas, localizadas a una profundidad de 5-6 metros, cuentan con baldas con vasijas en las paredes y esqueletos humanos en el centro de la estancia. Un equipo de arqueólogos se desplazó al lugar para estudiar los hallazgos.
El historiador Leoníd Iliukov comentó al diario Rossíyskaia Gazeta que las catacumbas podrían datar del siglo V después de Cristo. "Los jarros rituales se conservaron perfectamente. La cámara que contenían los esqueletos será indudablemente interesante para los arqueólogos", afirmó el especialista.