Miles de manifestantes vuelven a las calles por cuarto fin de semana consecutivo en Bielorrusia (VIDEOS, FOTOS)
Decenas de miles de manifestantes han salido nuevamente a las calles de Minsk, mientras continúan las protestas por cuarto fin de semana consecutivo en Bielorrusia. La indignación popular es motivada por el resultado de las elecciones presidenciales del mes pasado, donde muchos consideran que fueron manipuladas.
Участники акции протеста «Марш единства» идут мимо стелы «Минск — город герой» к резиденции Лукашенко. pic.twitter.com/E4DpFB4xE1
— TJ (@tjournal) September 6, 2020
Los ciudadanos descontentos se reunieron el domingo por la tarde en el centro de la capital y se dirigieron hacia el palacio presidencial para exigir la renuncia del mandatario del país, Alexánder Lukashenko. Los manifestantes lo acusan de falsificar los resultados de los comicios del 9 de agosto y reprimir brutalmente los disturbios civiles subsiguientes.
Протестующие снова подошли к резиденции Лукашенко в Минске. На этот раз, предусмотрительно взяв зонты pic.twitter.com/SHv94ayPcN
— Лента.ру (@lentaruofficial) September 6, 2020
Sin embargo, el palacio, así como otros edificios gubernamentales, permanecen bajo vigilancia de las fuerzas del orden para impedir el avance de la gente.
Минск. Некоторые протестующие подошли вплотную к кордону силовиков — показали им плакаты и оставили цветы на колючей проволоке.Фото: Вадим Замировский, https://t.co/SAPdczGoiGpic.twitter.com/CYjxqEk9lu
— TUT.BY (@tutby) September 6, 2020
Asimismo, la Policía bloqueó las vías de acceso con una barrera pesada reforzada con alambre de púas, desplegó camiones con cañones de agua y vehículos blindados, según muestran las imágenes de la escena.
Разгон курятника. Минск сегодня. pic.twitter.com/JgpxTlIlWx
— Альбац Манделаки (@AlbatsManda) September 6, 2020
A diferencia del fin de semana anterior, cuando el mal tiempo dispersó efectivamente la protesta, esta vez la gente llegó preparada para afrontar la lluvia. No obstante, el número de participantes comenzó a disminuir a medida que el mal clima se intensificaba.
En otras ciudades del país también se registraron levantamientos, aunque a menor escala.