Políticos surgidos de la proscripción judicial: Quiénes son los reemplazantes de Evo Morales y Rafael Correa en las elecciones de Bolivia y Ecuador

La inhabilitación de figuras del progresismo latinoamericano por vía judicial para participar de elecciones ha sumado un nuevo —y lamentable— capítulo en la región. Pero, al mismo tiempo, abrió la puerta a flamantes referentes que, sin la popularidad de otros líderes, serán puestos a prueba en las urnas por primera vez. 

Mediante fallos judiciales viciados y emitidos justo a tiempo, Rafael Correa y Evo Morales, dos expresidentes que transformaron de Ecuador y Bolivia, respectivamente, bajo los preceptos del llamado 'socialismo del siglo XXI', quedaron definitivamente fuera de carrera como precandidatos electorales. 

El primero buscaba acompañar a Andrés Arauz en la fórmula presidencial de Unión por la Esperanza (UNES) para las elecciones de febrero de 2021, pero el Tribunal de Casación confirmó su condena a 8 años por una causa de corrupción. La acusación sostiene que, mediante "influjo psíquico", Correa instigó a otros funcionarios de su Gobierno para que reciban dádivas. Más allá de las inconsistencias de la causa conocida como 'Sobornos', a la que el exmandatario llama "bochornos", la decisión le prohíbe participar de contiendas electorales de por vida. 

El segundo, Morales, aspiraba a una banca en el Senado por el departamento de Cochabamba en los comicios de octubre, luego de haber sido derrocado por un golpe de Estado en noviembre pasado, en medio de una escalada de violencia y acusaciones de fraude en lo que fue su cuarta reelección, aunque nunca fueron comprobadas.

Según el Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Bolivia, el exmandatario no cumple el requisito legal de residencia en el país en los dos años inmediatos anteriores a la elección. Si bien tiene domicilio legal en Cochabamba, Morales vive en Argentina prácticamente desde que se produjo el golpe militar en su contra, luego de haber pasado un mes de asilo político en México.  

'El binomio de la esperanza'

"Finalmente lo lograron. En tiempo récord sacan sentencia 'definitiva' para inhabilitarme como candidato", había expresado Correa cuando se emitió la resolución judicial que lo marginó de la competencia electoral, el pasado 7 de septiembre. Nueve días después, la alianza UNES presentó la candidatura de Rabascall a la vicepresidencia, en reemplazo del exmandatario.

UNES inscribió oficialmente al llamado 'Binomio de la esperanza' en su formación original, Arauz-Correa, a la espera de que el Consejo Nacional Electoral (CNE)  rechazara la postulación del exmandatario ecuatoriano, algo que finalmente sucedió.

Las razones fueron expuestas por el poder electoral el 1 de octubre: una, el fallo condenatorio de la Justicia, y dos, que el mes pasado, el CNE no reconoció la candidatura de Correa debido a que no acudió presencialmente a firmar su inscripción, sino que lo hizo por internet desde Bélgica, donde vive con su familia desde 2017.

No obstante, el Consejo, siguiendo los procedimientos legales, dio un plazo de 48 horas para que UNES pueda formalizar la inscripción del binomio Arauz-Rabascall, reemplazante de Correa.  Y el pasado sábado la nueva dupla fue legalizada por el organismo. 

Neoliberalismo o economía popular y solidaria

Nacido en septiembre de 1960 en la ciudad de Guayaquil, Carlos Rabascall, de 59 años, es un ingeniero comercial, periodista especializado en economía y CEO de una empresa de comunicación estratégica que lleva su nombre: Rabascall Comunicaciones.

Su cara es sumamente conocida, ya que fue conductor del noticiero matutino de Ecuador TV, el canal público, entre agosto de 2014 y diciembre del 2017. 

En diálogo con RT, Correa describió a Rabascall como una persona "de un gran humanismo, progresista y vinculado con los sectores empresariales". 

Aunque se trata de un hombre cercano al correísmo, nunca ha formado parte del Movimiento Revolución Ciudadana, ni ha oficiado como funcionario de Gobierno durante la década en que el espacio estuvo en el poder. 

Para Rabascall, en las elecciones del año próximo "está en juego la continuidad de un modelo neoliberal austero que le quita plata y trabajo a las familias, o un modelo del progresismo que parte de una economía popular y solidaria, que ya demostró durante 10 años que genera crecimiento económico, que disminuye la inequidad y la pobreza, y que genera empleo", según declaró en una entrevista con Confirmado.net. 

"No se puede proscribir a los pueblos"

En febrero de este año, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Bolivia inhabilitó la candidatura de Evo Morales al Senado por no cumplir con el requisito de radicar en el país, fallo que fue validado semanas atrás por la Sala Constitucional Segunda de La Paz.

Al conocer la decisión, Morales denunció un "golpe contra la democracia", por considerar que se trató de una "decisión política ilegal e inconstitucional" tomada bajo "amenazas". "La historia demuestra que podrán inhabilitar a Evo pero no podrán proscribir al pueblo", dijo. Y agregó que acataría el fallo. 

A partir de allí entró en escena el dirigente cocalero boliviano Leonardo Loza, de 38 años, quien fue elegido por el Movimiento al Socialismo-Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos (MAS-IPSP) como reemplazo del expresidente en la candidatura al Senado por el departamento de Cochabamba, bastión político del dirigente indigenista, después de que la Justicia ratificara su inhabilitación.

"Perseguido todos los días"

Loza es referente sindical obrero desde los 17 años, y fue vicepresidente de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba, una de las principales agrupaciones gremiales de cocaleros de Bolivia.

La Justicia de su país le abrió múltiples procesos a Loza por los bloqueos registrados en agosto en las calles, durante las protestas de los sectores masistas que reclamaron al Gobierno de facto que se realizaran las elecciones el 6 de septiembre, y no el 18 de octubre, como anunció el organismo electoral del país andino. 

"Estoy (siendo) perseguido todos los días. Pero no tengo miedo, tengo mucho valor, mucho coraje. Sé que no he cometido ningún delito", dijo Loza a radio Kawsachun Coca, durante un acto partidario celebrado el 13 de septiembre en el municipio de Sicaya. Y, en respuesta a los constantes ataques que recibe de la prensa y los sectores afines al golpe institucional, continuó: "No soy traficante, no soy terrorista, no soy sedicioso. Soy una persona normal, humilde, que cumple con todas las normas del Estado. Por más que hoy el Estado nos persiga, siempre vamos a resguardar nuestra libertad". 

Esta será la primera vez, desde 1989, en que Morales no puede presentar candidatura alguna en elecciones generales. En aquella oportunidad lo hizo como diputado por la extinta Izquierda Unida (IU), aunque sin éxito en las urnas.

Presidente entre enero de 2006 y  noviembre de 2019, cuando debió dejar forzadamente el poder, el líder del MAS seguirá atentamente las elecciones desde Buenos Aires, sabiendo que su movimiento es el favorito en las encuestas, a pesar de que todo el arco político conservador se ha unido para evitar una nueva victoria progresista. De hecho, la mandataria de facto, Jeanine Áñez, se ha apartado de la contienda democrática con ese único objetivo, según explicó ella misma. 

"Para la derecha internacional la democracia significa proscribir a los líderes populares que pueden ganar elecciones. Es el caso de nuestro hermano Rafael Correa. Como no nos pueden ganar en las urnas nos persiguen judicialmente con causas inventadas", analizó Evo Morales desde Twitter.

Emmanuel Gentile

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