El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, instó al pueblo de Armenia a "defender su futuro" e hizo un llamamiento "al mundo entero" para que brinden su apoyo a Azerbaiyán "en su lucha contra la ocupación y la opresión". Sus declaraciones han tenido lugar este domingo en medio de la reciente escalada entre Bakú y Ereván en la región de Nagorno Karabaj, que, aunque reclamada por Azerbaiyán, funciona 'de facto' como un Estado independiente con fuertes vínculos con Armenia.
"Si bien invitamos al pueblo armenio a defender su futuro contra su Gobierno y aquellos que los usan como títeres, hacemos un llamado al mundo entero para que apoye a Azerbaiyán en su lucha contra la ocupación y la opresión", escribió el mandatario turco en su cuenta de Twitter.
Asimismo, agregó en una serie de publicaciones que Ankara seguirá dando soporte a "sus hermanos azerbaiyanos con todos sus medios, como siempre" y lanzó un mensaje con duras críticas dirigido a la respuesta de otros países ante el conflicto entre ambas naciones. "La comunidad internacional, que no pudo tener una reacción necesaria y suficiente contra la agresión de Armenia, demuestra una vez más su doble rasero", enfatizó Erdogan.
La reacción de EE.UU.
Mientras tanto, varios países no tardaron en pronunciarse respecto a la situación y por su parte, el Departamento de Estado de EE.UU. comunicó esta jornada que "está alarmado" por las acciones militares que se están llevando a cabo en la región de Nagorno Karabaj y han provocado "numerosas víctimas, incluidos civiles". Washington instó a ambos países a detener "inmediatamente" las hostilidades y señaló que la intervención en el conflicto "de partes externas sería profundamente inútil y solo exacerbaría las tensiones regionales".
El presidente estadounidense, Donald Trump, tampoco se abstuvo de hacer comentarios y aseguró que su administración está "siguiendo de cerca" las recientes hostilidades entre Armenia y Azerbaiyán. "Sé que esto sucedió recientemente. Tenemos buenas relaciones en esa región. Veremos si podemos detenerlo", manifestó Trump.
La reacción de Moscú
Desde el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia se llamó a Armenia y a Azerbaiyán a abstenerse de acciones militares. El canciller ruso, Serguéi Lavrov, mantuvo una conversación telefónica con su homólogo armenio, Zohrab Mnatsakanián, durante la cual "expresó su seria preocupación por las hostilidades a gran escala en curso" y llamó al alto el fuego entre los dos países. Además, Lavrov anunció la disposición de Moscú a emprender "esfuerzos de mediación" para estabilizar la situación en Nagorno Karabaj.
Por su parte, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, habló con el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián. "La parte rusa expresó su gran preocupación por la reanudación de los enfrentamientos armados a gran escala", comunicaron desde el Kremlin, además de realzar la importancia de "evitar una mayor escalada del enfrentamiento y detener las acciones militares".