Las autoridades del municipio alemán de Beckum, en el estado de Renania del Norte-Westfalia, empezaron la construcción de un edificio residencial con una impresora 3D, el primer proyecto de ese tipo en el país germano, según lo anunció esta semana el Gobierno local.
Al centro de ese proyecto piloto está un gran dispositivo de cuya boquilla sale argamasa u hormigón especial e imprime capa por capa las paredes de la vivienda unifamiliar de dos pisos. Una vez construidos, los apartamentos contarán con alrededor de 80 metros cuadrados de superficie habitable en cada planta.
El Ministerio de Obras Públicas regional, que financia la iniciativa con 200.000 euros (unos 234.000 dólares), argumenta que la impresora se puede utilizar de forma flexible y más rápida que los métodos de construcción convencionales, ya que no es necesario colocar piedra sobre piedra. De hecho, el dispositivo puede edificar un metro cuadrado en tan solo cinco minutos.
"Estamos orgullosos de que la primera casa en ser impresa en 3D se esté construyendo en nuestro estado federal", declaró Ina Scharrenbach, ministra regional de Construcción. "Esto convierte a Renania del Norte-Westfalia en pionera de Alemania", agregó.
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