La Fuerza Aérea ha aprobado la revolucionaria bomba aérea planeadora GBU-53/B StormBreaker, desarrollada por Raytheon para su uso en cazas F-15E Strike Eagles, informa UPI. Se espera que en el futuro otros aviones estadounidenses también empiecen a usarla en combate.
La GBU-53/B StormBreaker, también conocida como Small Diameter Bomb II, se considera uno de los desarrollos militares estadounidenses más revolucionarios de la actualidad. Esta pequeña munición de menos de 100 kilos de peso puede alcanzar objetivos a distancias de hasta 110 kilómetros.
Su predecesora, la bomba GBU-39/B SDB I, que solo es capaz de alcanzar objetivos fijos, ya se ha convertido en un elemento básico para las patrullas de F-15E.
"El arma proporciona a los aviadores una ventaja significativa: la capacidad de atacar objetivos en movimiento marítimos o terrestres desde [gran] distancia en condiciones climáticas adversas", señaló Paul Ferraro, vicepresidente de la división Raytheon Missiles & Defense.
La GBU-53/B StormBreaker goza de estas capacidades gracias a un sistema de guía multimodo que le permite impactar objetivos en tierra o mar utilizando un buscador de imágenes infrarrojas, un radar de ondas milimétricas y un láser semiactivo de localización para concentrarse en el blanco.
El lanzamiento de la bomba puede ser realizado a más de 70 kilómetros de sus objetivos en movimiento. Esta distancia es suficiente para evitar que el avión se ponga a tiro de sistemas antiaéreos cañón-misil como el Pantsir-S1 ruso.
Además de la Fuerza Aérea, la Armada y el Cuerpo de Marines de EE.UU. tienen la intención de utilizar la nueva arma e integrarla en el arsenal de los cazas F/A-18E/F Super Hornet, así como en distintas versiones del F-35 de quinta generación.