Roehl Ribaya, de 47 años, quien en julio pasado fuera dado de alta de un hospital en el Reino Unido tras pasar 60 días en una UCI, murió de un "covid prolongado", informa Metro al citar a su familia.
El hombre, de origen filipino, fue ingresado en el Blackpool Victoria Hospital por primera vez el día 29 de mayo y pasó 48 días con un ventilador en su lucha contra el coronavirus. Tras recibir el alta en julio, enfermeras y médicos lo vitorearon por ser el último paciente en dejar la UCI de ese centro.
Ribaya sufrió un paro cardíaco este 13 de octubre, entró en coma y murió dos días después. Tras su muerte, la familia reveló que "nunca se recuperó" del coronavirus. "Él nunca volvió a ser el mismo. Estaba tan sin aliento todo el tiempo", contó la esposa del fallecido, Stella Ricio-Ribaya, quien trabaja como enfermera.
De acuerdo con Mark Delabajan, amigo cercano de la familia, la causa directa de la muerte de Ribaya fue un paro cardíaco, mientras que una fibrosis pulmonar post-covid actuó como causa secundaria. "Fue un covid largo. Su respiración nunca fue la misma y no podía subir las escaleras. Lo llevaron de vuelta al hospital varias veces", contó.
Este martes, Kevin McGee, director ejecutivo de Blackpool Teaching Hospitals NHS Foundation Trust, dijo que su personal estaba devastado por la muerte de Ribaya. "Nos entristeció mucho saber sobre la muerte de Roehl. Nuestros pensamientos y oraciones están con su familia en este triste momento", señaló.