Medios estatales norcoreanos instaron a los residentes a permanecer este jueves en sus casas y mantener todas las ventanas cerradas debido a una tormenta de arena procedente de China. Estas medidas se deben a que las autoridades temen que junto con partículas de "polvo amarillo" en el territorio del país pueda ingresar el coronavirus, según informaron los diplomáticos rusos a través de su cuenta en Facebook.
En particular, Rodong Sinmun, el diario oficial del gobernante Partido del Trabajo de Corea del Norte, advirtió que las tormentas de arena transportan "diversas partículas dañinas" que "pueden tener un impacto negativo significativo" si ingresan a las vías respiratorias.
"Hoy en día, la propagación del nuevo coronavirus continúa en todo el mundo, y dado que existe evidencia de la posibilidad de que un virus peligroso se mueva por el aire, la necesidad de tomar en serio las tormentas de arena y tomar las precauciones adecuadas se vuelve aún más obvia", escribió el periódico.
Así, se les pidió a los ciudadanos norcoreanos que se abstuvieran de realizar actividades al aire libre y no salieran a las calles "sin una necesidad especial". Además, era necesario cerrar las puertas y ventanas en todas las empresas y edificios residenciales. Después de la tormenta hubo que desinfectar las superficies, así como carreteras y lugares públicos.
Advertencias similares también fueron recibidas por las misiones diplomáticas acreditadas en Corea del Norte y por representantes de organismos internacionales, según la Embajada de Rusia en la nación.
Como resultado, las calles de Pionyang quedaron vacías este jueves, según reportó el portal NK News. Se informa que también se detuvieron las obras de construcción en todo el país.
Las autoridades de Corea del Norte afirman que en el país no ha sido detectado ni un solo caso de coronavirus.
- Las tormentas de arena estacionales son comunes en la región. No obstante, no hay evidencia científica que confirme el vínculo entre el polvo en el aire y el covid-19. De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC), el coronavirus puede permanecer en el aire durante varias horas, pero los casos de infección sin contacto con personas o superficies son extremadamente raros, especialmente al aire libre.