La actriz canadiense Nicki Clyne, conocida por su papel de Cally Tyrol en la serie de ciencia ficción 'Battlestar Galactica', defendió y confesó haberse relacionado por mucho tiempo con Keith Raniere, fundador del controvertido culto sexual estadounidense conocido como NXIVM.
De acuerdo con documentos judiciales revelados recientemente, Clyne fue socia durante diez años del falso gurú de esta secta que operaba bajo el manto de una compañía de autoayuda. En una carta obtenida por Fox News, dirigida a un juez federal de Brooklyn antes de que se dictara sentencia contra Raniere en junio de 2019, la actriz tacha de "absurdo" decir que la organización "fue creada para que Keith tuviera parejas sexuales". "Encuentro esta idea completamente absurda e incluso ofensiva, como mujer y compañera de Keith durante más de una década", subraya.
La canadiense aseguraba que con su escrito quería dejar las cosas claras luego de ser "acosada" por la prensa y el público en general con "acusaciones falsas" en su contra. "Ahora estoy en un punto en el que la decisión de permanecer en silencio ya no es una opción, ni práctica ni moral, y espero sinceramente que mi voz pueda contribuir a tomar en consideración de forma más humana a un hombre que me importa mucho", escribió entonces.
Raniere fue declarado culpable el año pasado de los siete cargos que pesaban contra él: tráfico sexual, crimen organizado, explotación sexual de un niño y producción de pornografía infantil. "Nunca supe que Keith quisiera tener intimidad con alguien que no la quisiera, y es una idea ridícula pensar que se habría tomado tantas molestias por tener sexo", afirma al respecto Clyne.
La actriz formó parte de NXIVM y está casada con la actriz Allison Mack, conocida por su papel de Chloe Sullivan en la serie 'Smallville'. Esta última se declaró culpable en abril de 2019 de encargarse del reclutamiento de mujeres en la organización liderando una división llamada DOS, acrónimo en latín que se traduce como maestro de las compañeras obedientes.
"Podría haber refutado rotundamente la acusación de que DOS fue creado para que Keith tuviera parejas sexuales", asegura Clyne sobre el tema, añadiendo que de haber subido al estrado habría "desmantelado toda la teoría del Gobierno sobre DOS" y un siniestro 'culto sexual'. "Era un grupo de mujeres que buscaban la guía de una persona inteligente y de confianza", asevera.
Keith Raniere y Allison Mack están a la espera de la sentencia, ahora programada para el 27 de octubre. De acuerdo con las acusaciones, Raniere podría ser condenado a cadena perpetua.