La Policía de Nápoles se enfrentó la noche del viernes con centenares de manifestantes que salieron a las calles de la ciudad para protestar contra el toque de queda impuesto en la región de Campania para frenar la expansión del coronavirus.
Con gritos de "¡libertad!" los manifestantes marcharon por el centro de la ciudad lanzando botellas, piedras y petardos y quemando contenedores de basura. Algunos de ellos atacaron los coches policiales, y otros gritaban "Nos cierras, nos pagas", refiriéndose al presidente de la región de Campania, Vincenzo De Luca.
Las fuerzas de seguridad usaron gas lacrimógeno para dispersar a la multitud.
Las autoridades de esa región meridional decretaron un toque de queda entre las 23.00 y las 05.00 debido al rebrote de covid-19 en Italia, que este viernes sumó más de 19.000 contagiados. El presidente de Campania, Vincenzo De Luca, señaló que el país "está a borde de la tragedia" y llamó al Gobierno estatal a tomar medidas drásticas, incluido un nuevo confinamiento.