Un residente de la ciudad neozelandesa de Auckland mató a su exesposa con 12 puñaladas tras pasar años planeando el crimen, informa el diario NZ Herald.
Manchao Li, de 65 años, está siendo juzgado por cargos de asesinato e incumplimiento de una orden de protección dictada a favor de su expareja Zhimin Yang, ambos originarios de China. El crimen ocurrió en julio del año pasado y habría estado motivado por una disputa por la división de bienes. Li siguió a Yang, de 57 años, cuando esta se dirigía a su trabajo y la apuñaló con un cuchillo de caza.
El procesado se ha declarado inocente, pero la Fiscalía alega que él estaba obsesionado con vengarse de Zhimin, y que su asesinato fue la culminación de años de amenazas y acoso. El matrimonio se divorció en 2009, y según Manchao, su expareja le robó miles de dólares y le engañó para que firmara unos documentos relacionados con la repartición de bienes.
Algunos vecinos de Li, que declararon esta semana como testigos en el juicio, revelaron que el procesado les habló sobre diversas formas de hacer daño a Yang y que "la vida sería mejor" si ella estaba muerta. Además les habría mostrado diferentes armas, incluyendo el cuchillo con el que perpetró el crimen, insinuando que las usaría contra su exesposa.