Especialistas advirtieron de que la variante del covid-19, detectada entre los visones de Dinamarca, podría llevar una amenaza aún mayor para la población, informa The Guardian.
"El peor de los casos sería que se iniciara una nueva pandemia en Dinamarca. Existe el riesgo de que este virus mutado sea tan diferente de los demás que tendríamos que poner cosas nuevas en las vacunas y, por lo tanto, [la mutación] haría que todo comenzara desde el principio", aseveró Kare Molbak, director de enfermedades infecciosas del Instituto Estatal de Sueros de Dinamarca. Sin embargo, señaló que actualmente el mundo está en una situación mejor en comparación con el comienzo de la pandemia. "Conocemos el virus, tenemos medidas implementadas que incluyen pruebas y control de infecciones, y aplicaremos todos nuestros conocimientos para que el brote sea contenido", aseguró Molbak.
Problemas para la vacuna
Por su parte, Allan Randrup Thomsen, virólogo de la Universidad de Copenhague, no cree que el país esté a punto de "convertirse en una nueva Wuhan". Sin embargo, enfatiza que la nueva variante del virus podría desarrollarse aún más y tornarse "completamente resistente", con lo cual "una vacuna no serviría", de modo que la situación sí es seria.
El experto neerlandés Wim van der Poel insistió en que se requiere más investigación de esta variante del virus. Sin embargo, sostiene que incluso si no hay mutación, la circulación del virus entre visones y los mustélidos (grupo que incluye comadrejas, tejones, nutrias, hurones, martas y glotones, entre otros) podría presentar un gran riesgo para la humanidad.
De acuerdo con Ian Jones, investigador de la Universidad de Reading (Reino Unido), no es nada raro que el virus mute, ya que se adapta a un nuevo organismo para penetrar en sus células. A pesar de calificar la posibilidad de transmisión de esta versión al ser humano como "un riesgo teórico", elogió las medidas de prevención impuestas en Dinamarca.
Rápido aumento de contagios
La mutación del coronavirus detectada en los visones se está extendiendo muy rápidamente. Este jueves se infectaron 12 personas, mientras que este viernes su número se elevó a 214. Las autoridades danesas impusieron restricciones sanitarias adicionales en la región de Jutlandia Septentrional: el transporte público dejará de entrar y salir de la región, mientras se ha instado a la población a permanecer en sus casas.
La primera ministra del país, Mette Frederiksen, también habló de un "cierre real" de la región, destacando que "los ojos del mundo están dirigidos hacia nosotros".
Al mismo tiempo, este jueves se informó sobre la decisión de sacrificar a toda la población de visones criados en el país: 15 millones de ejemplares.