El inmunólogo alemán Ugur Sahin, cofundador y director ejecutivo de BioNTech, la empresa que está desarrollado la vacuna BNT162b2 en colaboración con la farmacéutica estadounidense Pfizer, dijo a BBC One que gracias al uso de ese fármaco la vida debería volver a la normalidad el próximo invierno boreal.
Un análisis temprano del ensayo de esa vacuna experimental contra el covid-19 mostró una eficacia superior al 90 % en voluntarios sin infección previa. Sahin espera que la vacuna pueda reducir a la mitad la transmisión del virus, lo que resultará en una "reducción drástica de los casos". Los desarrolladores esperan que los pacientes que reciban la vacuna —que requiere dos dosis inyectadas en el brazo con tres semanas de intervalo— sean inmunes al coronavirus durante al menos un año.
"Estoy muy seguro de que la transmisión entre personas se reducirá con una vacuna tan eficaz, quizá no el 90%, pero tal vez el 50%, aunque no debemos olvidar que incluso eso podría resultar en una reducción drástica de la propagación de la pandemia", dijo el especialista, que cree que la situación tardará un poco más de lo previsto en volver a la normalidad.
Sahin sugirió que "este invierno va a ser duro" y agregó que el objetivo era entregar más de 300 millones de dosis en todo el mundo para el próximo mes de abril, cuando ya se podría empezar a observar el efecto de la vacuna. "El verano nos ayudará porque la tasa de infección bajará en verano, y lo que es absolutamente esencial es que obtengamos una alta tasa de vacunación para o antes del otoño/invierno del próximo año", señaló.
El profesor dijo que es fundamental que todos los programas de vacunación se completen antes de ese período de tiempo. "Estoy seguro de que esto sucederá porque hay varias empresas de vacunas que nos ayudan a aumentar el suministro y a que podamos tener un invierno normal el próximo año", añadió.