El nivel del dióxido de carbono en el aire ha seguido aumentando durante todo el 2020 a pesar de la pandemia mundial de covid-19, reporta la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
Los resultados, publicados en el boletín anual de gases de efecto invernadero de la OMM, muestran que los niveles de CO2 continuaron aumentando en 2019, alcanzando un nuevo máximo de 410 partes por millón (ppm).
Las medidas de confinamiento globales destinadas a proteger a las personas del covid-19 han causado una reducción temporal en las emisiones de CO2 a nivel mundial de hasta un 17 % a nivel mundial, según estimaciones del Global Carbon Project. Sin embargo, esta caída de las emisiones no ha sido suficiente para disminuir la concentración de CO2 en la atmósfera, señala la OMM.
"Sobrepasamos el umbral global de 400 ppm en 2015. Y solo cuatro años después, superamos las 410 ppm. Nunca se había visto semejante tasa de aumento en la historia de nuestros registros. La caída de las emisiones relacionada con el bloqueo es solo un pequeño destello en el gráfico a largo plazo. Necesitamos un aplanamiento sostenido de la curva", afirmó el profesor Petteri Taalas, secretario general de la OMM.
Las estimaciones preliminares sugieren que las disminuciones en el uso del transporte, la demanda de electricidad y cierta actividad industrial provocados por las medidas contra la pandemia llevarán a una disminución anual de las emisiones globales de CO2 de entre el 4,2 % y 7,5 %, lo que no será suficiente para un cambio global de su concentración en la atmósfera, según la OMM.
Sobre las medidas para combatir el aumento de CO2, lo científicos explican: "una analogía es llenar una bañera con un grifo. Si el grifo representa las emisiones de CO2 y el nivel del agua en la tina es la concentración de CO2, mientras que hemos bajado ligeramente el grifo por un tiempo, el agua sigue fluyendo y, por lo tanto, el nivel sigue subiendo. Para frenar el cambio climático, el grifo debe estar cerrado y de forma permanente".