Carrie Lam, jefa ejecutiva de Hong Kong, confesó durante una entrevista el viernes que tiene "pilas de dinero" en su casa. Según reportan medios locales, su salario anual es de 5,21 millones de dólares de Hong Kong (unos 672.000 dólares), y la funcionaria lo recibe en efectivo.
La líder de la región administrativa especial china no tiene acceso a los servicios bancarios y no posee una cuenta en el banco. Lam necesita usar el efectivo todos los días debido a las sanciones por parte de EE.UU.
Washington congeló las propiedades estadounidenses de Lam y otros dirigentes de la ciudad, y criminalizó todas las transacciones financieras en Estados Unidos, cuando China impuso una nueva ley de seguridad en el territorio de Hong Kong a finales de junio.
"Es un honor ser tan injustificadamente sancionada por el Gobierno de EE.UU.", afirmó Lam. El pasado mes de agosto, la funcionaria había señalado que sufre de "un pequeño inconveniente" debido a las sanciones, ya que no puede usar sus tarjetas de crédito.