La centroderecha se impone en las municipales de Brasil mientras que el 'bolsonarismo' sufre otro duro golpe
La centroderecha consolidó su triunfo en la segunda vuelta de las elecciones municipales en Brasil y los candidatos del presidente, Jair Bolsonaro, fueron los grandes derrotados de los comicios, caracterizados por la participación más baja de las últimas décadas.
Los partidos de centroderecha no alineados con Bolsonaro se repartieron las alcaldías de las 18 capitales que estaban en disputa este domingo, tras la primera vuelta, donde ya se avizoraba esta tendencia. El Movimiento Democrático Brasileño (MDB) se ubicó en primer lugar con cinco alcaldes electos, seguido por el Partido de la Socialdemocracia Brasileña (PSDB) y Demócratas (DEM) con cuatro cada uno.
En esta nueva jornada, unos 38 millones de electores de 57 ciudades volvieron a las urnas. Esta cifra representa el 60 % del total de los 95 municipios brasileños, con más de 200.000 votantes, donde la normativa electoral permitía llevar a cabo un balotaje tras los comicios realizados el pasado 15 de noviembre.
El 'bolsonarismo' sufrió otro revés
En esta segunda vuelta, las opciones del mandatario en los estados de Fortaleza, Belém y Cuitibá perdieron y solo resultó ganador Tião Bocalom, del derechista Progresistas, en el estado de Río Branco.
Los alcaldes de las dos principales ciudades del país también sumaron triunfos a la centroderecha. Bruno Covas, del PSDB, quedó reelecto en Sao Paulo, mientras que Eduardo Paes, del MBD, derrotó al actual alcalde de Río de Janeiro, Marcelo Crivella, quien fue apoyado por el presidente.
El descalabro de las opciones del 'bolsonarismo' ya se había manifestado en la primera vuelta, cuando perdieron 11 de las 13 candidaturas a las alcaldías de diferentes ciudades que fueron respaldadas por el presidente.
En cuanto al Partido de los Trabajadores (PT), del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, sus candidatos ganaron en cuatro municipios, sin lograr imponerse en ninguna capital brasileña.
En la misma línea, el izquierdista Partido Socialismo y Libertad (PSOL), que no había logrado el triunfo en ninguna ciudad grande desde 2016, lo consiguió con Edmilson Rodrigues, quien resultó electo como alcalde de Belem.
En este nuevo proceso electoral la abstención fue de 29,50 %, equivalente a 11,1 millones de personas que no participaron. Esta cifra, que disminuyó medio punto porcentual con relación a la primera vuelta, sigue siendo la más alta desde 1996. Además, hubo un millón de votos en blanco (3,89 % del total de la votación) y 2,3 millones nulos (8,81 %).
El presidente del Tribunal Superior Eleitoral (TSE), Luis Roberto Barroso, afirmó que la abstención en la segunda vuelta fue mayor que la esperada por la Justicia Electoral y atribuyó la cifra al temor de los participantes al contagio de coronavirus.