Durante su gran rueda de prensa anual, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, afirmó que no se puede decir que existan socios cómodos, agradables o desagradables entre los líderes mundiales.
"Todos ellos tienen como objetivo resolver los problemas que enfrentan sus países. Esta es una máxima bien conocida: no hay buenos ni malos; hay intereses nacionales. Trabajo con todos para lograr los máximos resultados para Rusia. En algún punto tenemos que hacer concesiones; en otros, insistir en nuestra posición", dijo el mandatario.
Además, agregó que Rusia comparte intereses comunes en muchas áreas con China y afirmó que tiene una relación "amistosa y de confianza" con el líder del gigante asiático, Xi Jinping. Putin también comentó sus relaciones con el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, reconociendo que en ciertos temas no pueden ponerse de acuerdo. Al mismo tiempo, elogió a Erdogan como "un hombre que cumple su palabra" y que va hasta el final si ve que algo es beneficioso para su país.