México ha sido el país más mortífero del mundo para los periodistas este 2020. Nueve periodistas han sido asesinados en el país en lo que va de año, elevando el número de muertes a más de 120 desde el año 2000, según un informe del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).
Cuatro periodistas fueron asesinados, otro falleció víctima de un disparo mientas informaba desde la escena de un delito y el CPJ investiga la causa de la muerte de al menos otros cuatro profesionales de los medios de comunicación.
A pesar de que tras su llegada a la Presidencia, en diciembre de 2018, Andrés Manuel López Obrador se comprometió a tomar medidas contra esta lacra, en la gran mayoría de los casos de asesinato no se ha condenado a ningún acusado y los autores intelectuales siguen libres.
Al menos dos de los periodistas asesinados este año se habían adherido al Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas y, en ambos casos, los guardaespaldas asignados como parte de este programa federal de protección también fueron asesinados.
Al menos 30 periodistas fallecieron este año hasta el 15 de diciembre en todo el mundo. México, Afganistán y Filipinas fueron los países donde estos profesionales sufrieron un mayor número de asesinatos en represalia por su labor informativa. De hecho, el número de estos crímenes, 21, duplica la cifra recogida en 2019.