El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo este martes que su país está quebrado y que él no puede hacer nada.
"Jefe, Brasil está quebrado y yo no puedo hacer nada. Quería modificar la tabla del impuesto de renta, pero no pude", manifestó el mandatario a un grupo de simpatizantes a las puertas del Palacio de la Alvorada de Brasil, la residencia presidencial, según recoge el diario Folha de São Paulo.
Al ser consultado sobre lo que ha motivado esa grave situación económica, señaló que "existe ese virus", en referencia al coronavirus, que en su país ha alcanzado los 7,7 millones de contagios y más de 196.000 fallecidos.
Sin embargo, Bolsonaro, negacionista del impacto de la pandemia, mencionó que esta ha sido "potencializada" por los medios de comunicación "sin carácter" que tiene Brasil.
"Esa prensa sinvergüenza; es un trabajo incesante de intentar desgastar para echarnos de aquí (del gobierno) y poder atender sus intereses oscuros", criticó Bolsonaro.
Además de la prensa, el mandatario ha culpado del agravamiento de la situación económica del país a los gobiernos regionales y municipales, por imponer medidas de restricción con el objetivo de contener los contagios.
Las palabras del mandatario brasileño respecto al estado actual de la nación provocaron una ola de reacciones en las redes sociales, en donde se volvió viral la etiqueta #RenunciaBolsonaro, con la exigencia de cientos de usuarios pidiendo al Ejecutivo que abandone el cargo.
Respuesta del ministro Guedes
Tras las polémicas declaraciones de Bolsonaro, el ministro de Economía, Paulo Guedes, explicó al diario Folha de São Paulo que el jefe del Ejecutivo se refería "a la situación del sector público".
Guedes apuntó que no existe "divergencia" entre la posición de Bolsonaro y la postura del equipo económico, que ha fijado como prioridad establecer límites al gasto público.
Asimismo, el ministro refirió al citado diario que la nación suramericana está saliendo de la fase más aguda de la crisis, una explicación que refuerza lo señalado anteriormente por la cartera, que apuntó que la economía brasileña estaba "rebotando de manera sólida", cuestión que se vería reflejada con los resultados positivos que auguran en la recaudación de impuestos.
A principios de diciembre, Guedes dijo que la economía brasileña estaba experimentando una fuerte recuperación en "forma de V", supuestamente marcada por un sólido crecimiento del mercado laboral.