Trump podría convertirse en el primer presidente en la historia de EE.UU. que es sometido a juicio político dos veces
Donald Trump podría convertirse en el primer presidente en la historia de EE.UU. que es sometido a juicio político dos veces durante su gobierno, tras las protestas de este miércoles en el Capitolio encabezadas por partidarios suyos.
El mandato de Trump expira el 20 de enero, cuando se producirá la toma de posesión de Biden. Pero los demócratas en el Congreso, en particular la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, creen que incluso en los 10 días restantes que le quedan a Trump como presidente, representa un peligro para el país. En estos momentos en EE.UU. están discutiendo tres opciones para su posible salida.
25ª enmienda
Según la 25ª enmienda, la destitución es posible si el vicepresidente y la mayoría de los secretarios del Gabinete concluyen que Trump es "incapaz de cumplir con los poderes y deberes de su cargo". En ese momento, las funciones presidenciales se delegarían automáticamente en el vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, hasta la toma de posesión de Biden.
El 7 de enero The New York Times informó que Pence no apoya la idea de sacar a Trump del poder con la 25ª enmienda, según una fuente cercana al vicepresidente. Sin embargo, Pence no descarta invocar la 25ª enmienda para destituir a Donald Trump en caso de que su conducta se vuelva más inestable en los días previos a la toma de posesión de Joe Biden, prevista para el 20 de enero, reportó CNN citando a otra fuente cercana a Pence.
'Impeachment'
Asimismo, Trump podría convertirse en el primer presidente en la historia de EE.UU. que es sometido a juicio político dos veces.
El 24 de septiembre de 2019, Pelosi anunció el inicio de una investigación de juicio político que tenía como fin destituir a Trump bajo la sospecha de que pudo presionar en una conversación telefónica a su homólogo ucraniano, Vladímir Zelenski, para que investigara a su rival político, Joe Biden.
No obstante, en febrero de 2020 el Senado de EE.UU. absolvió al presidente Donald Trump en el juicio político, dando por terminado de esa manera el tercer 'impeachment' en la historia del país.
Los senadores estadounidenses llevaron a cabo dos votaciones separadas por cada uno de los dos cargos del 'impeachment': abuso de poder y obstrucción al Congreso. Con 52 votos a favor y 48 en contra, el Senado controlado por los republicanos, primero desestimó las acusaciones contra el mandatario presentadas por el Partido Demócrata y lo absolvió del primer cargo. El Senado luego votó 53-47 para absolver al mandatario de la supuesta obstrucción al Congreso al bloquear testigos y documentos solicitados por la Cámara de Representantes.
Esta vez, los demócratas en el Congreso tienen la intención de iniciar el procedimiento de juicio político bajo el artículo sobre la incitación deliberada a la violencia contra el Gobierno de EE.UU. y llevarlo a cabo de manera acelerada, según The New York Times. Pero aún así, es casi seguro que no podrá completarse para el 20 de enero: debido a las vacaciones de Navidad, la votación en el Senado sobre la destitución de Trump no será posible hasta el 19 de enero.
Sin embargo, la ley permite continuar el procedimiento de juicio político después de la expiración del mandato del presidente. A pesar de la falta de un amplio apoyo para la idea de un segundo 'impeachment', Pelosi y otros demócratas no parecen tener la intención de abandonarla. Si la Cámara de representantes declara a Trump un juicio político y el Senado lo destituye (incluso después de que expire su mandato), se le podría prohibir volver a ocupar cargos públicos, incluido el cargo de presidente, según Vox.
Dimisión voluntaria
Pelosi también expresó la esperanza de que después del asalto al Capitolio, Trump anuncie su renuncia anticipada y entregue el poder a Pence. Al menos dos integrantes del mismo partido pidieron la renuncia de Trump: el miembro de la Cámara de representantes Adam Kinzinger y la senadora Lisa Murkowski.
Según Wall Street Journal, el asalto de Capitolio fue un ataque al proceso constitucional de transferencia de poder después de las elecciones. Los editores expresaron la opinión de que el juicio político a Trump enfurecería a sus partidarios y dividiría aún más a la sociedad estadounidense, por lo que lo mejor que un presidente en funciones puede hacer es presentar su renuncia. No obstante, especialistas consideran improbable la renuncia voluntaria de Trump.
Si te ha parecido interesante, ¡compártelo con tus amigos!