Australia quiere matar a una paloma mensajera que viajó 13.000 kilómetros a través del Pacífico
Las autoridades australianas planean sacrificar una paloma que llegó al país procedente de la costa oeste estadounidense, tras desaparecer durante una carrera que se disputó en el estado de Oregón el 29 de octubre de 2020. La razón para querer acabar con la vida de un ave que realizó una impresionante travesía de 13.000 kilómetros es que podría suponer una amenaza de enfermedades para la fauna local, según indicaron desde el Servicio Australiano de Inspección y Cuarentena (AQIS).
El ave la encontró Kevin Celli-Bird, residente de Melbourne, en el traspatio de su casa el 26 de diciembre, y cuenta que el animal estaba agotado.
"Salí a verla porque estaba bastante débil y no parecía tenerme miedo, y vi que tenía una banda azul en la pata. Obviamente pertenece a alguien, así que logré atraparla", contó, citado por AP.
Celli-Bird se puso en contacto con la Unión Estadounidense de Palomas de Carreras, que le comunicó que el animal está registrado a nombre de un propietario de Montgomery, en el estado de Alabama. El australiano intentó contactar con esa persona, pero aún no ha obtenido respuesta.
Los expertos creen que la paloma, a la que Celli-Bird llamó Joe en honor al presidente electo de EE.UU., llegó a la costa australiana viajando como polizón en un barco de carga. Su historia se difundió hasta llegar a oídos del AQIS, que se puso en contacto con el hombre para que la capturara. Pero entonces el ave ya había recuperado fuerzas y, a pesar de que se ha instalado en el jardín de Celli-Bird, este no ha logrado atraparla.
Según el comunicado del Departamento de Agricultura, responsable de la bioseguridad, la paloma "no puede permanecer en Australia" porque "podría comprometer la seguridad alimentaria del país y sus poblaciones de aves silvestres". Por ello, están considerando contratar a un cazador de aves profesional para que la sacrifique.
El mayor vuelo de larga distancia de una paloma jamás registrado comenzó en Arras, Francia, y terminó en Saigón, Vietnam, una distancia de 11.600 kilómetros que el ave recorrió en 24 días en 1931.