Una mujer que a los 13 años fue secuestrada, violada y torturada por un hombre que conoció en línea relata cómo el depredador se ganó su confianza
La estadounidense Alicia Kozakiewicz, sobreviviente de uno de los primeros casos de secuestro de niños relacionados con Internet, detalló este miércoles su experiencia y relató cómo un depredador en línea se ganó su confianza. Lo contó durante una entrevista en el programa 'No Interruption', de la cadena Fox Nation, dedicado al caso, que en su momento recibió una amplia atención en los medios.
"Conocí a alguien en línea que pensé que era mi amigo, que me comprendía", recordó. Pero con quien en realidad se estaba comunicando Kozakiewicz, entonces una adolescente de 13 años, era con Scott Tyree, un programador informático de 38 que la secuestró y violó cuando finalmente se conocieron en persona el 1 de enero de 2002.
"Eso es lo que hacen los depredadores. Buscan encontrar vulnerabilidades en un niño. Y lo siguiente que supe fue que estaba en un automóvil y ese hombre me apretaba la mano con tanta fuerza que pensé que se la había roto", señaló Kozakiewicz, que actualmente tiene 32 años.
Tyree, quien había viajado a Pittsburgh para encontrarse con su víctima, la llevó a su casa en Virginia, donde la mantuvo cautiva durante cuatro días. "Fui violada, golpeada y torturada en ese sótano", declaró Kozakiewicz. Sus torturas fueron transmitidas en vivo por el depredador.
"La gente a menudo me pregunta '¿pensaste que te iba a matar?' Y no era una cuestión de si iba a hacerlo, sino de cuándo", aseveró la mujer.
Kozakiewicz fue rescatada por el FBI después de que un espectador de la transmisión en línea de Tyree reconociera a la joven, cuya foto había visto en un anuncio de personas desaparecidas.
"Soy muy afortunada de que todo se solucionara, y me rompe el corazón saber que no muchos niños que han sido secuestrados por desconocidos o han vivido situaciones como la mía tienen esa oportunidad", subrayó Kozakiewicz, que después de su experiencia se convirtió en oradora motivacional, defensora de personas desaparecidas y experta en seguridad en Internet.
En septiembre de 2003, Tyree fue sentenciado a prisión y pasó 17 años entre rejas. En febrero de 2019 fue puesto en libertad condicional y trasladado a una casa en Pittsburgh, cerca de donde vivían los padres de Kozakiewicz, lo que provocó quejas por parte de la víctima y su familia. En octubre de 2019, Tyree fue devuelto a prisión por dos años más por violar los términos de su libertad condicional.