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Arrestan a un adolescente en EE.UU. como sospechoso de matar a su familia tras ser reprendido por su padre por salir de casa sin permiso
Los oficiales hallaron el pasado domingo en una vivienda 5 cadáveres con heridas de bala, mientras el hermano menor del detenido logró escapar y fue trasladado a un hospital en estado crítico.
Las autoridades estadounidenses arrestaron la noche de este lunes en Plainfield a un adolescente, de 17 años, sospechoso de haber matado a tiros a 5 personas en la casa de sus padres en Indianápolis (Indiana). El joven, cuya identidad no fue revelada debido a su edad, probablemente será acusado como adulto a finales de esta semana en el Tribunal Supremo del condado de Marion, informan medios locales.
Según un informe policial, los agentes recibieron una llamada hacia las 04:00 del pasado domingo, en la que indicaron que un individuo había recibido disparos en el nordeste de la ciudad. Al llegar al lugar de los hechos, los oficiales encontraron tiroteado al hermano menor del sospechoso, siendo trasladado a un hospital en estado crítico, y hallaron en la vivienda 5 cadáveres con heridas de bala.
Las víctimas fueron identificadas como los padres del presunto asesino: Kezzie Childs y Raymond Childs, ambos de 42 años; sus hijos Elijah Childs, de 18 y Rita Childs, 13 y la embarazada Kiara Hawkins, 19, detalló la Oficina del Forense de Marion.
Por su parte, el joven superviviente detalló a los agentes que su hermano mayor había sido reprendido por su padre por salir de casa sin permiso. El adolescente afirmó que mientras estaba en la planta baja de la vivienda con sus padres, oyeron disparos en el piso de arriba y a su hermana gritar "les ha disparado", seguido de más disparos.
Luego el presunto atacante "bajó las escaleras con una pistola y empezó a disparar", recordó, y agregó que logró salir corriendo por la puerta lateral de la casa, mientras su hermano lo perseguía disparándole.
El sospechoso se enfrenta a varios cargos de homicidio intencional con arma de fuego e intento de asesinato.
El jefe del Departamento de Policía Metropolitana de Indianápolis, Randal Taylor, declaró anteriormente que fue "el mayor tiroteo con víctimas múltiples en más de una década" que sufrió esa ciudad y fue la muestra de "un tipo diferente de maldad".
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