La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, destacó este martes que las medidas coercitivas unilaterales impuestas por EE.UU. en contra del país suramericano han ocasionado la pérdida de ingresos brutos por el orden de los 102.000 millones de dólares.
Durante la presentación del informe de gestión del Gabinete Ejecutivo ante la Asamblea Nacional (AN), Rodríguez enfatizó que las sanciones aplicadas por Washington en contra estatal petrolera Petróleos de Venezuela (PDVSA), a partir de 2019, incidieron en que en el país cerrara el 2020 con una producción de apenas 339.000 barriles por día.
La alta funcionaria precisó que el promedio de producción petrolera del país para el año 2015 era de 2.817.000 barriles por día, pero después de las sanciones, "Venezuela tuvo una pérdida de 2.153.000 barriles de petróleo diarios. Es un daño sin precedentes".
"En el año 2020 ingresaron solamente 743 millones de dólares, contra los 65.607 millones de dólares que ingresaron en el año 2008. Es el resultado de una agresión económica que inició en el 2013. Se cortaron todos los flujos externos de financiamiento a Venezuela", detalló la vicepresidenta.
En ese sentido, recordó que asfixiar los ingresos en divisas de un país como Venezuela, que tiene un modelo económico altamente dependiente de sus exportaciones de petróleo, "va directamente contra la actividad económica" porque "prácticamente todos los productos que se hacen en el país tienen un producto importado y el gobierno de EE.UU. lo sabía".
Ese impacto negativo de las sanciones también se evidenció en el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) real, que experimentó una caída sin precedentes, al pasar del 0 % en el año 2017 a -23 % a finales de 2020.
Rodríguez comparó ese daño al PIB con el sufrido por Alemania tras la segunda Guerra Mundial, cuando se lanzaron 1,5 millones de toneladas de bombas. "Como Francia en 1940 o la depresión económica de EE.UU. en 1930", insistió.
"Año del robo"
La vicepresidenta también recordó que el 2020 "fue también el año del robo de activos, como Citgo y Monómeros", por parte de EE.UU. y el exdiputado opositor Juan Guaidó, quien se autoproclamó como supuesto "presidente interino" de Venezuela en enero del 2019.
Rodríguez repudió, además, que debido al bloqueo y las sanciones impuestas por EE.UU. ocho menores de edad, que formaban parte del programa de trasplantes Pdvsa-Citgo, fallecieran porque el Estado venezolano perdió el control de esta empresa. "A estos niños les debemos la necesidad de superar y vencer el bloqueo, batallar sin descanso", expresó.
Los recursos de Citgo, a través de la Fundación Simón Bolívar, estaban originalmente destinados a pacientes con enfermedades crónicas, cuya tecnología médica o tratamientos requerían atención en el extranjero, con previa mediación de la Comisión de Salud de PDVSA.