Los científicos militares rusos han propuesto una forma de contrarrestar una posible 'operación multidominio' de la OTAN en un artículo publicado recientemente en la revista 'Fuerzas aeroespaciales: teoría y práctica' del centro educativo y científico militar de la Academia de la Fuerza Aérea Zhukovski.
El concepto de 'operación multidominio', que apareció en EE.UU. hace unos años, prevé que, en el caso de una guerra, Washington y sus aliados actúen de manera simultánea y coordinada en tierra, mar, aire, espacio y ciberespacio.
Esta operación implicará un ataque aéreo masivo integrado con misiles hipersónicos, operacionales-tácticos y de crucero, así como con drones y aviones de ataque tripulados. Esto permitirá, "ya en las primeras horas del conflicto", neutralizar los arsenales de misiles y fuerzas nucleares del enemigo, sus instalaciones de control del grupo de aviación, sistemas de defensa aeroespacial, objetos de energía, comunicaciones y las formaciones militares más preparadas para el combate, escriben los autores del artículo, el doctor en ciencias militares Vladilén Stuchínski, y el candidato de ciencias militares Mijaíl Korolkov.
De acuerdo con los científicos militares, para repeler las 'operaciones multidominio' es necesario el "uso coordinado" de la aviación con vehículos aéreos no tripulados, armas de misiles, equipo de guerra electrónica y un sistema de ataque de reconocimiento, como los misiles hipersónicos Kinzhal, que pueden ser lanzados fuera de las zonas de combate de la defensa aérea del enemigo y fuera de las zonas de visibilidad del radar.
Estas medidas permitirán causar un "daño inaceptable" al enemigo en el etapa inicial de su agresión, afirman los autores.
"En estas condiciones, Rusia puede pasar de una política de disuasión de un enemigo potencial con armas nucleares a una política de intimidación infligiendo una destrucción compleja e inaceptable con todo tipo de armas, como parte de las acciones preventivas frente a una amenaza de guerra local sobre Rusia", señalan los autores.