Autoridades del Gobierno de China mantuvieron una reunión con ejecutivos del fabricante de autos eléctricos Tesla para atender una serie de denuncias hechas por consumidores del país relacionadas con distintos fallos mecánicos y técnicos registrados en sus vehículos, recoge Reuters.
En la reunión sostenida entre funcionarios de distintas instituciones gubernamentales y representantes de la compañía estadounidense fueron tratados, entre otros temas, reportes sobre baterías incendiadas, aceleraciones espontáneas y fallos en las actualizaciones del 'software', informó la Administración Estatal para la Regulación del Mercado de China.
Ante los señalamientos, Tesla se comprometió a investigar de manera puntual las denuncias realizadas y a fortalecer los procesos de inspección, así como a seguir las directrices de las autoridades. "Cumpliremos estrictamente las leyes y regulaciones chinas y siempre respetaremos los derechos de los consumidores", comentó un representante de la compañía.
Esta no es la primera vez que la empresa fundada por Elon Musk ha sido señalada en China por deficiencias en los vehículos que produce. En octubre del año pasado, comenzó la retirada de 48.442 autos del país asiático debido a la presencia de componentes defectuosos que podían aumentar el riesgo de accidentes.
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