El precio de un mismo procedimiento puede variar hasta 10 veces en EE.UU. dependiendo de la compañía de seguros del paciente, reveló este jueves The Wall Street Journal, al analizar los datos de alrededor de 6.000 hospitales estadounidenses.
En particular, el parto por cesárea puede costar entre 6.241 y 60.584 dólares. Los factores que determinan el precio son las tarifas del hospital y su inclusión en la red de la aseguradora de la embarazada.
No se trata solo de diferencias regionales. Al revisar los datos del sistema hospitalario Sutter Health, que incluye 24 centros médicos del norte de California, los periodistas supieron que un procedimiento cardíaco varía entre 89.752 para los clientes del programa de cobertura gubernamental Medicare, y 515.697 dólares para los pacientes cuya empresa de seguros no incluye el hospital en su red. El precio mínimo para las aseguradoras privadas es de 197.900 dólares.
En el caso del reemplazo de cadera o rodilla, el programa estatal Medicaid para la gente necesitada debe pagar 3.264 dólares y Medicare, 16.439 dólares. Para aseguradoras comerciales, los precios empiezan en 51.895 dólares, y la tasa más alta —para empresas que no incluyen el hospital en su red— alcanza los 81.617 dólares.
Desde Sutter Health indicaron que las tarifas dependen de negociaciones con cada compañía de seguros en particular. Por su parte, el exejecutivo de la aseguradora Cigna Corp., Alan Muney, confirmó que las empresas tienen que trabajar con tarifas mayores que las estatales.
"Esto probablemente sea típico de lo que va a ver en los grandes sistemas de entrega", dijo el empresario.
La calidad no depende del precio
Los hospitales estadounidenses suelen cobrar márgenes de sus pacientes con seguros privados, sostiene The Wall Street Journal. Resalta que, según estudios económicos, tienden a optar por aumentar las tarifas en vez de reducir costos e inflan los precios cuando pueden hacerlo. Tampoco es probable que mayores tarifas supongan un mejor tratamiento.
"No hemos encontrado evidencia de que el precio sea una gran señal de calidad", cita la publicación a Michael Chernew, de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard.
El sistema de salud de EE.UU. es el más costoso del mundo. Solo en el sector hospitalario se gastan anualmente 1,2 billones de dólares en el país. En cuanto a los gastos en la medicina en general, en el 2018 se estimaba que equivalían al 20% del PIB de EE.UU.
Los datos analizados por los periodistas fueron revelados por los hospitales como resultado de una orden del presidente anterior de EE.UU., Donald Trump, que entró en vigor el 1 de enero.