El mercado de tarjetas de crédito y débito robadas más popular en la web oscura, Joker's Stash, ha dejado de operar definitivamente. Tras ello, la mente criminal detrás de todo el proceso, conocida por su seudónimo como 'Joker', se retiraría con una fortuna de más de 2.000 millones de dólares en bitcoines, en caso de no ser atrapada por el FBI o la Interpol, informa Forbes.
La página Joker's Stash, considerada como el sitio más grande de comercio de datos de tarjetas robadas desde 2014, ha anunciado que todos sus servidores y copias de seguridad serán borrados y que nunca más volverá a abrir. Además, la web también permitía a los delincuentes lavar sus saldos ilícitos de criptomonedas.
Por su parte, el 'Joker' había advertido a los clientes que el sitio cerraría definitivamente el 15 de febrero. Sin embargo, según los expertos en análisis de 'blockchain' para el control de los delitos financieros de Elliptic, el sistema dejó de operar el pasado 3 de febrero, dejando a muchos de sus usuarios sin poder cobrar su dinero.
Debido a la identidad oculta del fundador de Joker's Stash, los especialistas han calculado la cantidad de dinero con la que este delincuente se 'jubilaría', mediante el valor cobrado por comisiones sobre las transacciones que pasaron por el sitio.
A modo de ejemplo, en 2018 pasaron unos 139 millones de dólares por la empresa criminal y se estima que, entre 2015 y 2021, el sitio habría recaudado unos 60.000 bitcoines, cuyo valor supera los 2.500 millones de dólares, por concepto de comisiones y tarifas de depósito.
Después de despedirse de los cibercriminales que usaban su sitio, el 'Joker' declaró irónicamente que "todo el dinero del mundo nunca te hará feliz y que "las cosas más valiosas de esta vida son gratis".
Algunos creen que la pandemia pudo jugar un papel en la decisión de cierre de la página después de que en octubre del año pasado, el fundador revelara que estuvo hospitalizado con covid-19. Aunque hay quienes especulan que la página fue cerrada por la Policía, lo más probable es que haya sido por voluntad propia. "La última risa parece ser la del 'Joker'", comentó el periodista de tecnología de Forbes, Davey Winder.