Un brote de peste bubónica, enfermedad causada por la bacteria Yersinia pestis, ha provocado la muerte de al menos 31 personas en la República Democrática del Congo.
Según le informó a AFP Anne Laudisoit, miembro de la ONG Ecohealth Alliance, "entre el 15 de noviembre y el 13 de diciembre se identificaron múltiples casos de peste en el área de Biringi de la provincia de Ituri", en el noreste de ese país.
Por su parte, el ministro de Salud de Ituri, Patrick Karamura, aseguró que al menos 520 personas han contraído la enfermedad y "más de 31" han fallecido.
La infección por Yersinia pestis puede ocasionar también peste neumónica y septicémica, pero lo más habitual es que el enfermo desarrolle peste bubónica. Esto sucede cuando el bacilo viaja a través de los canales sanguíneos y ataca a los ganglios linfáticos.
De acuerdo con Karamura, la mayoría de los casos registrados en esa nación desde el comienzo del brote son de peste bubónica, aunque también hay cinco casos de la variante neumónica y dos de la septicémica.
Desde hace décadas, la peste bubónica es curable con distintos antibióticos, pero gran parte de la población en algunos países de África carece de acceso al tratamiento adecuado. Quienes contraen la enfermedad y no reciben antibióticos, tienen hasta un 90 % de posibilidades de morir.
Esta infección, que los investigadores creen que se originó en Asia Central, supone un peligro para los humanos desde hace siglos. De hecho, la Yersinia pestis fue responsable del brote epidémico más mortífero de la historia, conocido como la peste negra, que azotó Europa a finales de la Edad Media y mató a un tercio de su población.