Este domingo el papa Francisco, en el marco de su viaje a Irak, rezó el Ángelus en la ciudad cristiana de Qaraqosh y lanzó un discurso afirmando que "Dios nunca defrauda" y que él tiene la última palabra y "no el terrorismo o la muerte".
Tras haber visitado Mosul, en la tercera jornada de su viaje, el papa dijo a los fieles que veía "la diversidad cultural y religiosa de la gente de Qaraqosh", lo que recuerda que "la belleza no es monocromática, sino que resplandece por la variedad y las diferencias", según recoge Vatican News.
El religioso subrayó que incluso ante la devastación que causa el terrorismo y la guerra, se puede ver "con los ojos de la fe" el "triunfo de la vida sobre la muerte". Asimismo, sostuvo que el ejemplo de sus progenitores constituye una "gran herencia espiritual" que "continúa viviendo" en ellos: "Abracen esta herencia. Esta herencia es su fortaleza. Ahora es el momento de reconstruir y volver a empezar, encomendándose a la gracia de Dios", afirmó durante el rezo matutino.
El pontífice protagoniza una gira de tres días por Irak que comenzó el pasado viernes y finalizará este lunes. Se trata de la primera visita de un papa católico a este país y de la primera salida internacional que realiza Francisco desde que se desatara la pandemia de coronavirus.