Pese a que decenas de personas murieron en Myanmar el pasado fin de semana a manos de la Policía y el Ejército, las protestas contra el golpe de Estado continuaron este lunes en las calles de la nación asiática.
La junta militar birmana impuso la ley marcial en dos municipios de Rangún, la ciudad más grande del país, donde al menos 59 personas murieron y otras 129 resultaron heridas en la jornada de ayer, según Myanmar Now.
Varios videos publicados en línea muestran escenas sangrientas filmadas en todo el país el domingo después de que las fuerzas de seguridad reprimieran las manifestaciones disparando munición de fuego real.
Myanmar está sumida en el caos desde el 1 de febrero, cuando el Ejército del país tomó el poder invocando un supuesto fraude en las últimas elecciones y poniendo así fin a un período de nueve años de gobierno civil y provocando manifestaciones masivas contra el golpe.
Los militares arrestaron a la presidenta de Gobierno electa, Aung San Suu Kyi, y a varios líderes de su partido. Suu Kyi también ha sido acusada de varios otros delitos, incluidos cargos de corrupción y contrabando de dispositivos electrónicos ilegales.