El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, ha aceptado que fue un error retrasar el inicio del primer confinamiento en el país por el coronavirus, según afirmaron personas cercanas al Gobierno, al tiempo que insisten en que la información proporcionada por los asesores científicos en ese momento estaba desactualizada, informa The Telegraph.
Una fuente declaró al diario que la complacencia le costó al Gobierno británico "semanas perdidas" al comienzo de la pandemia, de la que tardó meses en recuperarse. Por este motivo, el equipo de Johnson ahora actuaría "más duro, con anticipación y más rápido" para combatir el brote si tuviera tiempo de nuevo, aseguraron.
Según The Telegraph, el momento justo para imponer el confinamiento habría sido el 14 de marzo del año pasado, nueve días antes de la fecha decretada. Reino Unido es el país europeo que más muertes ha sufrido a causa del covid-19.