El Instituto de Medicina Legal de Colombia confirmó en un comunicado el hallazgo del cuerpo de una adolescente de 16 años entre un grupo de siete víctimas de un bombardeo del Ejército Colombia en el municipio Calamar del departamento del Guaviare, en la Amazonía colombiana.
Se prevé que el número total de víctimas se incremente porque aún hay dos cadáveres "que reposan en la institución", según el documento.
La edad de los fallecidos, a excepción de la adolescente, oscila entre los 19 y 30 años. En el grupo hay cuatro hombres y tres mujeres: Sebastián Andrés Varón Rojas (23 años), Jhonatan Sánchez Zambrano (19), Alexandra Restrepo Tovar (25), Yesenia Lorena Joven Vargas (23), Luisa Fernanda Felantana Quichoya (19), Harrison Prada Cortés (20) y Manuel Vanegas Vásquez Irían (30).
Medicina Legal recalcó que sus informes serán remitidos al fiscal del caso, "cuando se tenga plena certeza sobre las identidades".
Menores asesinados en el bombardeo
Hace casi una semana, el periodista Hollman Morris y el congresista Roy Barreras denunciaron que varios niños habrían muerto durante una acción militar que tenía como objetivo atacar a las disidencias de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Según esta versión, habría al menos 14 víctimas, de las cuales 12 serían menores de edad.
La acción militar, que ha sido rechazada por distintos sectores, ocurrió el pasado 2 de marzo. Al respecto, el ministro de Defensa de ese país, Fernando Molano, dijo en una entrevista que fue un operativo contra una "estructura narcoterrorista" que "usa jóvenes para convertirlos en máquinas de guerra".
En su opinión, los menores de edad "dejan de ser víctimas cuando cometen delitos" y "desafortunadamente, se convierten en criminales". Sus palabras generaron indignación en el país, ya que contravienen lo establecido por la Convención sobre los Derechos del Niño, que obliga a los Estados Partes a adoptar "todas las medidas posibles para asegurar la protección y el cuidado de los niños afectados por un conflicto armado".
Según medios de comunicación locales, la menor de edad que fue identificada por Medicina Legal se llamaba Danna Montilla, aunque el reporte de la institución no detalla esa información.
De acuerdo a una conversación de WhatsApp publicada por Caracol, la adolescente se habría comunicado en mayo de 2020 con un profesor para obtener información sobre cómo proseguir sus estudios a distancia.
Aunque la joven no le manifestó a su interlocutor las razones de su abandono del año escolar de manera presencial, el docente supuso que había sido reclutada por un grupo armado y presuntamente hizo la notificación ante las autoridades, sin obtener respuesta.
Precedentes
Este nuevo hecho de sangre en Colombia estuvo precedido por otro similar, en agosto de 2019, cuando se reportaron 18 menores de edad víctimas de un bombardeo militar en San Vicente del Caguán, en el departamento del Caquetá.
En esa oportunidad, el caso causó conmoción y fue debatido ampliamente en el Congreso, donde la oposición intentó aprobar una moción de censura en contra del entonces ministro de Defensa, Guillermo Botero, quien también justificó las acciones también en contra de las disidencia de las FARC. En medio del escándalo, Botero renunció.
Sobre el reclutamiento de menores por parte de grupos armados en zonas rurales donde existen condiciones precarias y abandono del Estado, la Defensoría del Pueblo informó que en 2020 fueron sumados a las filas de esas organizaciones 83 niños, niñas y adolescentes.