Transforman una planta de conversión de residuos en una pista de esquí

Bjarke Ingels, un arquitecto danés de 46 años, ha logrado instalar una pista de esquí en el techo de una moderna planta de conversión de residuos en energía, en las afueras Copenhague.

Según comentó Ingels durante una entrevista con Bloomberg Green, tardó más de 10 años en poder llevar a cabo este proyecto debido a numerosos obstáculos legislativos y prácticos.

"Normalmente, una planta de energía está diseñada para que su techo explote si hay una sobrepresión, pero esa no es una opción cuando tienes esquiadores en el techo", dijo Ingels. "En general, se nos presentó una cascada de dilemas y tuvimos que realizar bastantes gestiones para que esta fantasía se hiciera realidad".

Ingels considera que la planta de energía es un excelente ejemplo de "sostenibilidad hedonista". La idea es resolver los problemas ambientales de una manera que conduzca a construcciones cómodas y atractivas para las comunidades locales. Para ello, propone repensar el concepto de contaminación y residuos y convertirlo en un recurso útil.

"La noción de la economía circular es eliminar todos los callejones sin salida cada vez que se obtiene un subproducto. La contaminación es esencialmente un subproducto que aún no se ha identificado como un recurso", indicó.

Ingels reveló que tuvo miedo de que, una vez terminado el proyecto, se sintiera simplemente como "estar parado en el techo de una planta de energía". Sin embargo, ahora reconoce con orgullo que cuando caminó por primera vez por la zona comprendió que no era así.

"Esto es realmente una montaña hecha por el hombre y produce una sensación incluso más majestuosa de lo que esperaba", manifestó.