El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, dijo el sábado que las sanciones que China introdujo contra dos funcionarios estadounidenses y contra un legislador y una entidad canadiense son inaceptables y prometió continuar defendiendo los derechos humanos.
"Las sanciones de China son un ataque a la transparencia y la libertad de expresión, valores que están en el corazón de nuestra democracia. Apoyamos a los parlamentarios en contra de estas acciones inaceptables y continuaremos defendiendo los derechos humanos en todo el mundo con nuestros socios internacionales", publicó el político canadiense en Twitter.
Este sábado, Pekín anunció nuevas sanciones que, respecto a la parte estadounidense, conciernen a Gayle Manchin, presidente de la Comisión de EE.UU. sobre Libertad Religiosa Internacional (USCIRF), y al vicepresidente de la misma entidad, Tony Perkins; los afectados canadienses por la medida son el parlamentario Michael Chong y el Subcomité de Derechos Humanos Internacionales del Comité Permanente de Asuntos Exteriores y Desarrollo Internacional de la Cámara de los Comunes.
De esta manera el país asiático respondió a las restricciones aplicadas previamente en su contra por Washington y Ottawa por las supuestas violaciones de los derechos humanos de la minoría musulmana uigur en la región china de Xinjiang.